Juan Marín dejará la política para ser gestor en la privada o en la Junta: "Dependerá de mis hijos"

Lo que sí puede asegurar, en conversación con EL ESPAÑOL, es que ha "dejado la primera línea política". Señala que tiene que poner en orden "asuntos personales" antes de dar ningún paso, ¿pero quién mediatiza esa decisión? "En un 60% mis hijos… y el vóley". ¿El vóley? Sí, Juan Marín es un amante de este deporte e incluso entrena a un equipo femenino. 

El otro 40% depende de su madre, sus amigos, "y de que lo que vaya a hacer me llene". Su tono es relajado pero contundente: "Las decisiones sobre la vida de Juan Marín -dice- las tomará Juan Marín"; nadie en su nombre. Incluso desde antes de las elecciones regionales en los mentideros políticos se le han atribuido decenas de cargos: Defensor del Pueblo, presidente de una autoridad portuaria y hasta Portavoz del Gobierno.

[Con Juan Marín (Cs) y su 'otro equipo', al que entrena al vóley: "Sánchez hace mucho daño"]

Aun ahora, a pesar del descalabre electoral y de estar pasando unos días en Sanlúcar, a ciudad en la que empezó su trayectoria política, sabe que hay mucha gente que le quiere en su equipo, incluidas varias empresas. Es habitual verle pasear, aunque es un hombre inquieto: "Es una pena que la experiencia de mucha gente desaparezca. Si alguien me llama, allí estoy".

El exdirigente de Ciudadanos va a dar algunas charlas fuera del espacio político y está empezando a colaborar con medios de comunicación. Eso sí, nserán charlas políticas al estilo conferenciante remunerado: "Yo no cobro por dar mi opinión", afirma.

Sin duda, será una figura cotizada, porque nadie como él conoce tan bien el Gobierno de Juanma Moreno. Han sido más de tres años de trabajo conjunto con el presidente y el dirigente de moda del PP nacional, Elías Bendodo. Habla con ellos casi a diario. Con el coordinador general de los populares, además, le une una muy buena relación personal y este verano estuvieron juntos en los toros en Málaga.

[Misión reconstruir a Ciudadanos en Andalucía: "Quizás era hasta necesario darnos ese varapalo"]

Marín habla a estas alturas con la libertad de quien sabe que tiene dos años de cesantía tras haber ocupado el puesto de vicepresidente de la Junta. No tiene ninguna prisa y así lo hace notar. 

Juan Marín lo ha sido todo en Ciudadanos Andalucía. Ahora no es nada porque él decidió salir. Desde que Marín dejara todos sus cargos en Ciudadanos, el partido liberal en la comunidad se ha recompuesto y actualmente está dirigido por una gestora. Desde este órgano recuerdan que estarían encantados de que Marín, "como ya ha manifestado él, acabe su vida política como candidato a la Alcaldía de Sanlúcar de Barrameda". Lo que no está claro es que los últimos años de Marín sean estos.

De hecho, sea cual sea la decisión del sanluqueño la primera en saberlo no será la gestora, sino Inés Arrimadas. Él ya no está en la ejecutiva, que se ha reunido este lunes sin su presencia. Sin embargo, sí sigue formando parte de la permanente.

Una de las posibilidades que ha cobrado mucha fuerza, aunque no parece ser la preferida de Marín, sería la de presentarse a alcalde en su ciudad. En Cs son conscientes de la popularidad del liberal y saben que su candidatura sería muy buena; incluso en Sanlúcar hay quien da una vuelta de tuerca: "Juan no necesita ningún partido en su pueblo".

Al final, en su pueblo es un tipo querido. La gente le para por la calle y le saluda con el cariño del que lleva toda la vida paseando por los mismos barrios. Ahora es uno más, está disfrutando de unos días de tranquilidad que hace décadas que no recuerda: "Empecé a trabajar con once años, imagínate...", rememora. Resume años de frustraciones en una confesión:

"Podría acostumbrarme a esta vida", una sentencia que acompañaba a una foto en la que se veía sonriente y relajado hace tan sólo diez días. Marín está reordenando su vida y tiene por delante tomar una decisión que tiene a muchos compañeros de partido y exmiembros del Gobierno andaluz en vilo.

Además, en los últimos años ha atesorado una experiencia en la gestión turística desde lo público que ha hecho despertar el interés de compañías privadas. Pero, por otro lado, tiene la mano de Juanma Moreno tendida para conocer cuáles son sus inquietudes. Ahora los tiempos son otros: "A veces tomamos decisiones que a corto plazo parecen buenas, pero no lo son".