Enigma Party, la empresa encargada de organizar en Sevilla este fin de semana la fiesta de Halloween para menores y que acabó con casi una veintena de ellos atendidos por las emergencias sanitarias por desvanecimientos y ansiedad, ha organizado otra para esta tarde en otro local de la capital hispalense.

Al menos, para tranquilidad de los padres, tal y como ha anunciado la propia compañía en sus redes sociales, está retransmitiendo vídeos de la misma en su perfil de Instagram, aunque no de una manera continua. El objetivo es que puedan ver que "todo está controlado y organizado".

Por el momento, y en las primeras dos horas de la fiesta, únicamente ha subido dos vídeos. En uno de ellos se puede comprobar que el local no está abarrotado al poco tiempo de comenzar. Todo lo contrario de lo ocurrido el sábado en la sala Music, que durante este lunes continúa precintada, según han confirmado a EL ESPAÑOL fuentes municipales.

Tras la alerta de varios asistentes, cuando llegó la Policía al local se encontró con una sala cerrada, sin ventilación, con las salidas de emergencia bloqueadas y sin agua en los servicios. 

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La Policía Local de Sevilla también destacó que el aire acondicionado no estaba en funcionamiento y que la sala no contaba con sistemas de ventilación, por lo que la temperatura era muy alta ante la gran acumulación de jóvenes en el interior. Eso, unido a la falta de agua corriente, implicaba mayor consumo de agua embotellada y mayor beneficio para la organización.

Al entrar al local, los policías encontraron a jóvenes caídos en el suelo que estaban siendo atendidos por otros menores. Todos presentaban la piel enrojecida, fatigados, con exceso de sudoración y mareos, y se quejaban a los agentes de la falta de agua para su hidratación.

El mismo cuerpo policial instruyó diligencias ante la Autoridad Judicial contra el organizador, un hombre de 42 años, en calidad de imputado no detenido. Se le acusó como responsable de la organización de la fiesta en la Sala Music Sevilla, en la zona de la Carretera Amarilla.

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Sin embargo, según ha podido confirmar este periódico, este local es reincidente en este aspecto. Al menos en 2021 la Policía intervino en dos ocasiones. Una de ellas, en Halloween, con adultos; otra el 17 de diciembre, con menores. En ambos casos la sala fue desalojada y precintada.

La empresa Enigma, en su comunicado de Instagram, echa toda la responsabilidad en a la sala: "Queremos aclarar que nuestra función en la fiesta es publicitar y venta de entradas. La organización de los porteros, seguridad, condiciones de la sala y trabajadores están en mano de cada discoteca".

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Este periódico ha intentado sin éxito ponerse en contacto tanto con los responsables tanto de la compañía, como de ambas salas, para conocer qué papel juega cada uno juega en la organización de este tipo de fiestas.

Por su parte, la Junta de Andalucía ha remitido a través de sus delegaciones territoriales una carta a todos los ayuntamientos andaluces con las medidas que se deben respetar para evitar incidentes de este tipo.