La presidenta de las Cortes Valencianas, Llanos Massó (Vox), ha vuelto a desmarcarse de la pancarta contra la violencia machista, exhibida este viernes tras el asesinato a tiros de Raquel en Alzira a manos de su expareja, un policía retirado.
Es la segunda vez que la segunda autoridad de la Comunitat Valenciana no se pone tras la pancarta de condena de la violencia machista, cosa que tampoco lo hizo el pasado 10 de julio tras el crimen machista de María en Antella, apuñalada por su expareja.
La presidencia del parlamento convocó el minuto de silencio "para condenar el asesinato de una mujer a manos de su marido" en Alzira, pero no para condenar un caso de violencia machista, como le reprochó el PSPV-PSOE. Los socialistas acusaron a la presidenta de la Cámara de incumplir el pacto contra la violencia de género.
Durante la legislatura pasada, la primera en la que Vox tuvo representación en el Parlamento valenciano, este grupo se puso siempre a un lado en las concentraciones convocadas por la institución cada vez que se producía un asesinato machista, al sostener que condenan "todo tipo de violencia".
En la concentración de este viernes, el resto de la Mesa de Les Corts, de diputados de los grupos parlamentarios y de personal de la institución se han ubicado tras la habitual pancarta con el lema "Les Corts contra la violencia masclista" (Les Corts contra la violencia machista), mientras que Vox se ha quedado en un lateral.
Se trata de una frase inocua, pero Vox no la comparte porque niega la violencia de género y la enmarca en la "intrafamiliar", una expresión que logró plasmar en el pacto de gobierno de la autonomía.