La manifestación de este sábado contra el cierre de la línea del cercanías que conecta Murcia con Águilas, logrará dos hechos inéditos en el bagaje histórico de protestas ferroviarias que atesora la capital del Segura: unas veces por los retrasos en la llegada del AVE y otras por el soterramiento de su vías. El primero de esos datos será para la hemeroteca: ningún dirigente del PSOE estará destrás de las pancartas reivindicativas. Y el segundo dato será para el morbo político: el PP y Podemos coincidirán en la misma protesta.
Desde la sede socialista en la calle Princesa han confirmado a EL ESPAÑOL que a la protesta de este sábado: "No va nadie". Por contra, en el PP siguen poniendo toda la carne en el asador para evitar el corte del cercanías, previsto el 1 de octubre por Adif, y que afectará a 1,2 milliones de pasajeros que anualmente cogen el tren en Murcia, Alcantarilla, Totana, Lorca... Los populares han desplegado esta semana carpas en cinco localidades para movilizar a los ciudadanos, la última, este viernes, en la Estación del Carmen de la capital del Segura.
"Murcia se va a convertr en una isla ferroviaria por el corte del cercanías y porque se perdará la conexión del Altaria con Madrid", tal y como ha alertado la portavoz del PP, Miriam Guardiola, en la carpa instalada en la puerta de la Estación del Carmen. "Estamos haciendo un llamamiento para que todos los murcianos, este sábado, se sumen a la manifestación que partirá a las siete de la tarde hacia la Delegación del Gobierno para pedir a Pedro Sánchez que no nos deje sin trenes, convirtiéndonos en una comunidad tercermundista".
Los populares mostrarán este sábado su lado activista con un nutrido grupo de representanes que asistirá a la protesta, y que estará compuesto por alcaldes y diputados regionales, a cuya cabeza irán los senadores Juan María Vázquez y Violante Tomás.
La manifestación ha sido convocada por la Plataforma en Defensa del Ferrocarril y su objetivo es reclamar al Gobierno de España que las obras del Corredor Mediterráneo no dejen fuera de servicio la línea Murcia-Águilas, de una tacada, y durante un periodo de tres años. Los asistentes reclamarán que el corte por las obras en el trazado se haga por tramos: localizados geográficamente y acotados temporalmente.
Una fuente del PSOE justifica la ausencia del partido en la manifestación, argumentando que "no estamos de acuerdo en la forma en la que se ha planteado". Y añade: "Nuestra postura es clara, queremos modernizar la línea ferroviaria regional para que sea de primer nivel".
El proyecto de Adif, en esencia, contempla una inversión cercana a los 3.000 millones de euros para crear la primera conexión directa de la historia entre Murcia y Almería. Todo ello, tras ejecutar una plataforma de doble vía, en ancho estándar y electrificada; frente a la actual vía única, en ancho ibérico y sin electrificar. Además, se eliminarán pasos a nivel, se construirán 23 viaductos, 9 túneles...
90.000 usuarios en el aire
El motivo por el que se ha convocado la protesta, este sábado, se debe a que esas obras dejarán fuera de servicio el cercanías, así como la conexión a Madrid porque será necesrio hacer trasbordos en Orihuela. Además, hay otro problema en el proyecto que la portavoz popular ha puesto sobre la mesa: "El plan de Adif durante el cierre de la línea no incluye autobuses accesibles para sillas de ruedas".
Miriam Guardiola ha concluído que "es escalofriante que Pedro Sànchez deje tiradas a más de 90.000 personas con movilidad reducida en la Región: una falta de sensibilidad con la discapacidad".
Juntos, pero no revueltos
En la protesta coincidirán dirigentes del PP y Podemos, pero evidentemente no habrá foto. La portavoz morada en la Asamblea Regional, María Marín, irá a la cabeza de los representantes de su partido que protestarán contra el Gobierno de España, del que son socios con el PSOE.
Marín ha sido muy crítica con el 'giro al activismo' de los populares: "Sería una provocación que altos cargos del PP con el historial de Francisco Bernabé acudan a la manifestación por el tren".
La portavoz de Podemos ha recordado que su formación lleva exigiendo todo el verano que se mantenga el servicio de cercanías, al tiempo que se ejecutan los trabajos para modernización ferroviaria. Marín ha realizado un llamamiento a la sociedad civil "para que el Partido Popular no se apropie de la manifestación, después de haber sido el mayor culpable del subdesarrollo ferroviario de la Región, de la llegada tarde y mal del AVE y del bloqueo durante años del Corredor Mediterráneo por su centralismo exacerbado".
Ciudadanos se suma a la protesta
El otro foco para el morbo político será la presencia en la convocatoria tanto de los miembros de Ciudadanos reconocidos por la dirección del partido en Madrid, como de otros que dejaron en la estacada a Inés Arrimadas tras el fracaso de la moción de censura pactada con el PSOE para sacar al PP del Gobierno de Murcia.
La nueva coordinadora regional de Cs a la que Arrimadas ha encomendado la misión de salvar el proyecto político en suelo murciano, María José Ros, ha confirmado a EL ESPAÑOL que asistirá a la manifestación. "Desde Ciudadanos rechazamos la intención del PSOE de sumir a esta región en un apagón ferroviario durante años, y creemos compatible la prestación del servicio de trenes con las obras del AVE, como opinan los trabajadores de Adif y Renfe", sostiene la líder naranja.
"Tampoco vemos bien el aprovechamiento que el PP quiere hacer de este tema, ya que en sus 16 años en el Gobierno de España nunca han pensado en sacar a la Región de Murcia del vagón de cola ferroviario en el que nos encontramos", ha criticado Ros. "Intentar enarbolar esa bandera ahora es de un cinismo absoluto: su actitud pendenciera, además, no va a solucionar nunca este grave problema. Queremos que PP y PSOE se sienten y eviten que la Región de Murcia sea una isla durante años".
Más País: "Es un desprecio"
El coordinador de Más País en Murcia, Óscar Urralburu, y que además es portavoz del partido que lidera Íñigo Errejón en el Congreso de los Diputados, también estará este sábado en la manifestación. "Consideramos que esta situación es uno más de los tradicionales desprecios del Gobierno de España, de cualquier signo político, con la Región de Murcia y sus infraestructuras", ha reflexionado Urralburu.
Durante el último año la formación de Errejón ha hecho un seguimiento en la Cámara Baja del proyecto de Adif y el Ministerio de Fomento. De hecho, Más País presentó varias preguntas a la Mesa del Congreso para conocer los planes del Gobierno central, respecto a cómo pensaba articular el avance del Corredor Mediterráneo con el mantenimiento de los servicios de cercanías en ancho ibérico en suelo murciano.
"No podemos plantear debates sobre los peajes en las autovías y desmantelar cercanías, aunque sea durante un periodo indefinido de obras que pueden alargase en el tiempo. Una situación como esta no se encuadra ni dentro de las políticas verdes ni de desarrollo que se impulsan desde las directivas europeas", defiende el partido de Errejón.