El PSOE saca rédito del 'hooliganismo' político con Vox como estrategia para movilizar a su electorado
La Encuesta Nacional de Polarización Política elaborada por el Cemop de la Universidad de Murcia alerta de una fatiga democrática entre los españoles.
17 junio, 2022 15:32Pedro Sánchez necesita a Santiago Abascal. Suena antinatura en términos políticos, pero electoralmente hablando es otro cantar: el socialismo recurre a la ultraderecha para movilizar a militantes y simpatizantes. Así lo recoge la Encuesta Nacional sobre Polarización Política, elaborada por el Centro de Estudios de Opinión de la Universidad de Murcia. "El PSOE es el que vive de polarizar gracias a que polariza con Vox, osea, la existencia de Vox es la que mantiene buena parte del electorado del PSOE", según ha resaltado Ismael Crespo, catedrático de Ciencias Políticas.
"Realmente, cuando vemos que el PSOE se mete en muchas refriegas con Vox no es baladí, es que hay una estrategia detrás y el hecho de que no lo haga Podemos, sino el PSOE, mantiene el sentir en su electorado del referente de la extrema de derecha que ya engloba también al Partido Popular", tal y como ha apuntado Crespo, este viernes, durante la presentación del estudio en el que han sido encuestadas 1.236 personas en todo el país, entre el 25 de abril y el 18 de mayo.
"Para reforzar el sentimiento de identidad, la izquierda maneja la llegada de Vox como un elemento referente y la derecha ha manejado mucho la idea de la extrema izquierda con Podemos". Tal ecuación tiene su reflejo en la encuesta porque el 61% de los consultados afirma que la crispación política ha aumentado en España de 2021 a 2022 y eso se nota en las urnas por sexos: las mujeres tienen más sentimientos de adhesión a los partidos de izquierdas y los hombres a las formaciones de derechas.
El catedrático ha admitido que el 'hooliganismo' político le funciona a los partidos como estrategia política en los comicios, pero tiene serias consecuencias en la sociedad: "La polarización se considera un elemento fundamental en la comunicación, como está ocurriendo en las elecciones de Andalucía, y es algo que funciona, la comunicación negativa funciona, defenestrar al contrincante funciona, pero la cuestión es cuáles son los riesgos de desgaste para el sistema democrático porque eso hace que no confiemos en la clase política ni en las instituciones".
De hecho, la Encuesta Nacional de Polarización Política advierte de que 4 de cada 10 españoles se muestran insatisfechos con el sistema democrático (36%). "Cuando el seis de enero se asaltó el Capitolio, se habló de 'hooliganismo' político: tú te sientes muy de un 'equipo' y para reforzar tu pertenencia a ese 'equipo' te sientes muy lejano al otro, y eso genera los grandes odios", según ha ejemplificado Crespo, en alusión a los disturbios que se vivieron en Estados Unidos ante la inminente salida de Donald Trump de la Casa Blanca tras perder las elecciones con Joe Biden.
"Hay radicalidad en algunos de los planteamientos ideológicos de los partidos desde que han surgido nuevas opciones políticas", según ha reflexionado Juan José García Escribano, doctor en Sociología de la Universidad de Murcia, y a la sazón, el otro responsable de la Encuesta Nacional de Polarización Política. "Todo esto genera un ambiente hostil para la construcción de consensos".
De momento, al PSOE le funciona la estrategia de usar a Vox para movilizar a sus militantes y simpatizantes, a la vista de que la encuesta refleja "un empate técnico" en intención de voto en caso de que se celebrasen ahora unas hipotéticas elecciones generales: el 28% de los sufragios serían para el Partido Socialista de Pedro Sánchez y el Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo. Además, el estudio señala que seis de cada diez españoles coinciden en subrayar que el líder que mayor rechazo les despierta es Santiago Abascal y el partido más repudiado también es Vox.
Por contra, el PSOE es la formación que más sentimientos de adhesión genera entre la población (20,8%), seguido muy de cerca por el PP (14,9%). Todo ello, a pesar de que Pedro Sánchez (18%) no es el líder que mayor feeling genera entre los españoles, ya que le superan por este orden: Alberto Núñez Feijóo (21,1%) y Yolanda Díaz (22,8%). Otra de las conclusiones llamativas del estudio es que casi la mitad de los encuestados (471,1%) considera que el país estaría mejor gobernado si las decisiones importantes se dejasen en manos de expertos.
"Cuatro de cada diez españoles están a favor de una tecnocracia", tal y como ha alertado el doctor García Escribano. "Se está produciendo lo que algunos llaman una fatiga democrática: la gente está bastante cansada de algunos comportamientos y empieza a aparecer esa fatiga".
Prueba de ello es que entre las conclusiones del estudio se recoge literalmente que "las actitudes hacia un modelo populista de democracia están considerablemente extendidas entre la ciudadanía de España. En torno a tres de cada diez españoles, apoya la opinión de que los ciudadanos en exclusiva deberían tomar las decisiones políticas más importantes en nuestro país (27,5%) o piensan que el país está dividido entre la gente corriente y la clase política corrupta que explota a la gente (32,5%)".
Todo ello ha llevado a Crespo y a García Escribano ha concluir con preocupación que "hay síntomas de agotamiento del sistema o el sistema está conducido por una clase política desgastada. Esto es peligroso: empieza uno jugando con cerrillas y se acaba incendiando".