El rey Felipe VI ha evitado este lunes cualquier referencia al proceso soberanista catalán durante su discurso en el acto de entrega de los despachos de la nueva promoción de jueces. A diferencia del año pasado, cuando en presencia de Artur Mas recalcó la importancia del respeto a la ley por parte de todos los servidores públicos, el monarca ha preferido en esta ocasión evitar el proceso independentista y se ha limitado a reivindicar la independencia de los jueces.
Felipe VI ha pronunciado su discurso en presencia del president de la Generalitat, Carles Puigdemont; de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau y del ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá. También estaban presentes el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes; la fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal; los vocales del órgano de gobierno de los jueces, el vicepresidente y los miembros de la Sala de Gobierno del Tribunal Supremo y el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), Jesús María Barrientos.
A pesar del camino emprendido por el Govern de la Generalitat y por las fuerzas independentistas del Parlament, el rey no ha repetido este año el tipo de mensajes que lanzó el curso pasado en presencia de Mas. En la pasada edición, Felipe VI recalcó en su discurso que respetar la ley era "la fuente de legitimidad y la exigencia ineludible para la convivencia democrática en paz y libertad". También hizo hincapié en que "para el poder judicial, como para el resto de instituciones del Estado, el respeto a la ley nunca ha sido, ni es ni debe ser un simple trámite, una mera formalidad, una alternativa".
Felipe VI ha iniciado su intervención condenando el "cobarde ataque terrorista" de Niza de la semana pasada. "Ninguna amenaza, por totalitaria -o violenta- que sea, conseguirá nunca doblegar la voluntad de nuestras sociedades de vivir en libertad conforme a los valores universales de la dignidad humana".
El rey no ha hecho tampoco ninguna referencia a la falta de Gobierno y ha basado su discurso en la defensa de la independencia de los jueces. "La independencia de la Justicia es esencia del Estado de Derecho y hemos de proclamarla, preservarla y respetarla tanto en su vertiente institucional como en en su vertiente individual", ha afirmado. "Vuestra independencia a la hora de impartir justicia ha de convertirse en una norma de comportamiento y en un modelo ético de conducta".
Carlos Lesmes, presidente del Tribunal Supremo, ha insistido a los nuevos jueces en la necesidad de que actúen con diligencia y con un "compromiso inquebrantable" con el bien común. "La ejemplaridad del juez se ha hecho ahora más imprescindible que nunca", ha afirmado. "Nuestra sociedad demanda un juez en el que poder confiar".
Los 50 componentes de la nueva promoción de jueces españoles -pertenecientes a la sexagésima sexta promoción de la Escuela Judicial, con sede en Barcelona- han recibido este lunes sus despachos. La promoción está compuesta por 32 mujeres y 18 hombres y sus miembros comenzarán a ejercer como jueces de adscripción territorial, es decir, sin plaza fija y como apoyo a jueces titulares.