El juzgado de Instrucción número 4 de Valencia no es el único organismo público que investiga las cuentas de Ribera Salud. Desde febrero de 2015, Hacienda mantiene también un expediente de comprobación abierto sobre los beneficios del grupo sanitario y sus liquidaciones de IVA e IRPF entre los años 2010 y 2013. La investigación abierta por Hacienda, reflejada en las propias cuentas de la compañía, afecta también a dos de las filiales que controlan sendos hospitales en Valencia.
"A fecha de formulación de las cuentas anuales consolidadas, las mencionadas actuaciones inspectoras tanto en la sociedad como en las UTE mencionadas se encuentran en una fase de preparación de la información requerida por las autoridades tributarias, estando por tanto las actuaciones inspectoras en una fase inicial", refleja textualmente la memoria financiera de la compañía para 2014, presentada en el Registro Mercantil en mayo de 2015, un mes después del arranque oficial del procedimiento.
Doce meses después, Ribera Salud reconoce en sus cuentas para 2015 (presentadas en mayo de este año) haber alcanzado un pacto con la Agencia Tributaria sobre uno de los hospitales investigados. El precio de ese pacto y la identidad del hospital se omiten de forma deliberada en la memoria contable de la compañía (no hay obligación legal de reflejarlo). Mientras que Hacienda, por su parte, guarda bajo su secreto profesional la cuantía y naturaleza de sus sanciones, que a juicio de la empresa no han provocado "impacto relevante".
Preguntados por EL ESPAÑOL, portavoces de Ribera Salud enmarcan este tipo de investigaciones en la "operativa habitual" de grandes compañías como la suya.
Más pactos con Hacienda
En junio de 2015, según los datos aportados al registro por Ribera Salud, la empresa acordó un nuevo pacto con la inspección fiscal, esta vez relacionado con el pago del IVA para la sociedad madre del holding como para la que controla uno de los hospitales investigados por los funcionarios fiscales, que se salda también "sin que hayan surgido impactos relevantes".
En febrero de 2016, se cerró sin sanción para Ribera Salud la investigación sobre retenciones e ingresos a cuenta del trabajo y capital mobiliario, por lo que según estos datos, "el resto de las actuaciones de comprobación e investigación", entre las que se incluye la sociedad que controla otro de los hospitales públicos valencianos, se amplió entonces en un plazo de doce meses.
"En opinión de la Dirección y de los asesores fiscales de la sociedad dominante, en relación al estado actual de las actuaciones inspectoras [...] no se tiene constancia de que pudieran materializarse contingencias relevantes en contra de la Sociedad dominante como consecuencia de las actuaciones iniciadas", reflejan las citadas cuentas.