No dio tiempo a poner sobre la mesa a vencedores y derrotados. Tampoco a hacer la colada de espaldas a los periodistas. El Consejo Ciudadano de Podemos, el ansiado día de la "unidad" pedida a gritos por la militancia tras Vistalegre 2, saltaba por los aires con una filtración justo antes de empezar: Íñigo Errejón será el candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid en las próximas elecciones autonómicas. Un movimiento pactado con Pablo Iglesias, que recompensa así a su exnúmero 2 justo después de arrebatarle la cartera más notable de la Ejecutiva y la portavocía en el Congreso.
Ceño fruncido y ya en la sala María Zambrano del Círculo de Bellas Artes, Iglesias pedía "discreción" a sus compañeros. Algunos de ellos, perplejos, recién llegados de provincias, conocían los nombramientos por la prensa antes de que se efectuasen. El lanzamiento de Errejón como candidato al Gobierno regional dejaba varios heridos por el camino y avivaba, de nuevo, la división entre corrientes.
Un 'dedazo' en la práctica
No se trata de un 'dedazo' en la teoría porque su paso adelante deberá ser refrendado en primarias, pero sí en la práctica. El apoyo de la familia contrincante, en este caso el propio Iglesias, le granjea una victoria segura.
Ramón Espinar, reciente ganador de las primarias en la capital y secretario general del partido en la Comunidad, era obligado a dar un paso atrás por culpa del intercambio de cromos entre Iglesias y Errejón. Los anticapitalistas, por su parte, se molestaban por un movimiento anunciado a bombo y platillo sin el visto bueno de los inscritos.
"Ha sido un palo duro. Nosotros hicimos la campaña para ganar a Cifuentes en 2019 y, de repente, te encuentras con esto", cuenta a este periódico un miembro del núcleo duro de Espinar. "Ha habido tensión... Los procesos internos tienen cosas feas y probablemente esta sea una de ellas". En cualquier caso, "Ramón ha tenido altura de miras, sabe que el perfil de Errejón es muy bueno para ganar a Cifuentes y lo ha aceptado. Además, ¿cómo vamos a empezar ahora otra guerra?".
"Suena a intercambio de sillones"
Un destacado miembro anticapitalista considera a Errejón "un buen candidato", pero lamenta su lanzamiento tan sólo unos días después de la sal en las heridas de Vistalegre 2. "No era el momento. Ahora se trataba de construir organización. Suena a intercambio de sillones", confiesa.
Según ha sabido EL ESPAÑOL, el traslado de Errejón a Madrid no se consultó siquiera con el Consejo Ciudadano Autonómico.
Un fundador de Podemos traza un análisis distinto. Se muestra "feliz" y "optimista" tras un Consejo Ciudadano que "ha cerrado las heridas". "Espinar es generoso, se cree el proyecto, sabe que tiene mucho por delante y anticipa cuidar el instrumento político a su protagonismo". Sobre las filtraciones, destaca: "Probablemente haya que revisarlo... Es complicado". Define el 'nombramiento' de Errejón como "clave" en el recién estrenado equilibrio de poderes: "Ha empezado un nuevo Podemos".
Sin ser 'errejonista', alaba el nuevo papel que jugará el exnúmero 2: "Me ilusiona verlo frente a Cifuentes. Ahora debe trabajar, reunirse con la gente de Madrid y pensar más en clave regional. Es un reto".
Pacto de directivos
Fue Errejón el primero en acercarse a las cámaras al acabar la reunión. Le pidieron que hablara en voz alta, pero dijo poco. Se le insistió, pero no confirmó. ¿Será usted candidato a la presidencia de la Comunidad? "El objetivo es 2019, pondremos toda la carne en el asador". Pero, ¿será usted candidato? "Es pronto para decir eso". La filtración, demasiado temprana, le ponía en un brete, el de ser percibido como un hombre de 'establishment', trasladado a la Comunidad a la vieja usanza, tras un pacto de palabra entre directivos.
Pablo Iglesias, minutos después, confirmaba el 'nombramiento' sólo entre líneas: "Ojalá se presente, será un gran candidato, es ganador allí donde vaya". El secretario general reconocía que esa conversación, la de 'trasladar' a Errejón a Madrid, comenzó en 2014. Hasta ahora, debido a su intención de cambiar el rumbo del partido a nivel nacional, el exnúmero 2 declinó la invitación. Ha aceptado tras su derrota en Vistalegre 2.
Ramón Espinar, derribado por el pacto entre Iglesias y Errejón, reconocía las conversaciones entre los dos líderes y confirmaba: "Errejón ha manifestado su ambición de ser candidato a la Comunidad". El secretario general de Podemos en esta región se plegaba a lo dictaminado por Iglesias y aseguró que no se presentará para dejar paso al exnúmero 2. "En política hay que tener responsabilidad y coraje para dar un paso adelante, pero todavía más para darlo a un lado cuando el proyecto lo requiere", terminó.