Según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicos (CIS) de octubre publicado este jueves, la preocupación de los españoles por Cataluña en septiembre tan sólo era del 7,8%. Una cifra muy baja en comparación con otras preocupaciones de los españoles como el paro (69,5%) o la corrupción (38%).
La realización de la encuesta, entre el 1 y el 10 de septiembre, coincidió con la aprobación de las leyes de desconexión de Cataluña y con el aumento de la tensión en las calles y las instituciones. Quizá debido a estos últimos movimientos secesionistas desde julio a septiembre la preocupación por Cataluña se ha multiplicado por seis, pasando de un 1,2 al 7,8. De este modo, esta respuesta ha alcanzado cifras históricas.
El paro y la corrupción, los principales problemas de los españoles
El primer problema de los españoles sigue siendo el paro -citado por el 69,5 frente al 70,6 por ciento en agosto-, la corrupción es el segundo pero ha bajado respecto a la última encuesta en 7,3 puntos porcentuales. En el anterior barómetro del mes de julio, coincidiendo con la operación Lezo, la preocupación por la corrupción seguía en máximos históricos, rozando el 50%. De hecho, el 49,1% de los españoles hablaban de la corrupción y el fraude como el principal problema de España, frente al 54,3% de mayo.
En tercer lugar se sitúan los problemas de índole económico que suben casi dos puntos hasta el 21,7 por ciento, seguidos de los políticos con un 20,7 -21,8 en agosto-. Los atentados de Cataluña hicieron que aumentase la preocupación por el terrorismo internacional, llegando a cotas del 15,6%. Una cifra que en julio sólo alcanzó el 4,5%.
Después del terrorismo a los españoles les preocupa la sanidad (9,7), la educación (8,4), los problemas sociales (7,9) y en noveno lugar, Cataluña con el 7,8 por ciento, por delante de la calidad del empleo con un 7,5.
En esta edición para el 20,7% de los españoles el primer problema del país eran los político en general, los partidos y la política. Una cifra que ha bajado en un punto. Por otra parte, respecto a la situación política general en España el 70,5 de los españoles la ve como mala o muy mala, un dato que no ha cambiado desde julio.