Un mero procedimiento burocrático o salvavidas electoral para el PP. El conseller de Cultura en funciones Íñigo Méndez de Vigo ha autorizado un segundo recurso de la Generalitat que pide el retorno a Cataluña de las 43+1 piezas que el Museo de Lérida acaba de devolver a Aragón. El ministro ha dicho en el Consejo de Ministros que mandará parar ese recurso.
Méndez de Vigo, que primero dijo que los bienes había que devolverlos y después se posicionó en contra y ahora vuelve la postura inicial, pedía la “devolución” de las piezas al Museo de Lérida, “por haber salido sin haberse respetado el procedimiento legalmente establecido”. Esta circunstancia ocurre después de que el ministro, portavoz y conseller desobedeciera las órdenes del juez.
Aragón habla de electoralismo
El Gobierno de Aragón no da crédito a lo ocurrido. La consejera de Cultura Mayte Pérez ha acusado a Méndez de Vigo de ser "cómplice" del expolio que la Generalitat catalana lleva tiempo ejerciendo sobre la comunidad y de "plegarse" a los intereses partidistas del PP.
Pérez ha asegurado que el ministro no se ha comunicado ni con ella ni con el presidente de Aragón, el socialista Javier Lambán, desde el pasado 1 de diciembre. Y ha calificado su actitud de "deslealtad y desprecio" hacia Aragón.
Las razones de Méndez de Vigo no están claras. Es cierto que el PP catalán y su candidato Xavier García Albiol han criticado la devolución de los bienes a Aragón. El Gobierno aragonés entiende que el recurso que ha autorizado el ministro es puramente electoralista. Todas las encuestas anuncian un batacazo del PP en las elecciones del 21-D. El PP daba por perdido su único escaño por Lleida.
Otras fuentes apuntan a que el recurso va de suyo y que es una mera actuación burocrática. Lo lógico, dicen, es que la Generalitat dé la batalla jurídica. Pero el propio Méndez de Vigo ha tenido un comportamiento errático y casi esquizofrénico con este asunto. Es verdad que no había una solución fácil. Por un lado, había una resolución judicial que cumplir y, por otro, estaba obligado a velar por los intereses de Cataluña como conseller en funciones. Cuando el juez dictó la providencia apelando al 155, el ministro dijo que acataría la resolución. El magistrado dio un plazo a los técnicos de las dos administraciones para organizar el traslado.
La actuación policial
No sólo no lo hizo, sino que además autorizó un recurso. La consecuencia más evidente fue que el traslado de los bienes se convirtió en una operación policial, con la Guardia Civil entrando al Museo de Lérida, en lugar de actuación civil entre técnicos de patrimonio. El recurso que se ha presentado ahora, y que ha publicado EL ESPAÑOL en exclusiva, tiene como base precisamente la actuación policial que toleró Méndez de Vigo.
“Nada justifica esta extraordinaria actuación fuera de los horarios habituales de intervención de los juzgados civiles de primera instancia", dice en su escrito el letrado de la Generalitat.
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