Mariano Rajoy ha encontrado una nueva manera de hacer política para frenar en seco el auge imparable de Ciudadanos. El presidente del Gobierno aprovechará la docena de convenciones sectoriales que el Partido Popular va a celebrar por toda la geografía española para desvelar iniciativas legislativas que el Ejecutivo llevará al Parlamento.
Los conservadores quieren recuperar la iniciativa política aunque estos proyectos no salgan adelante por su minoría parlamentaria -el PP solo tiene 137 escaños-. El objetivo ya no es cerrar un acuerdo previo para asegurar que la medida saldrá adelante. Los conservadores han dado un volantazo en su carrera hacia las elecciones de 2019 para obligar a sus rivales políticos a retratarse ante temas que consideran su bandera.
El Gobierno estrenó esta manera de hacer política en Galicia hace dos semanas, cuando celebraron la convención de educación y el ministro del ramo, Íñigo Méndez de Vigo, propuso que los profesores realicen un MIR cada dos años. El PP dejó pasar solo una semana para tomar de nuevo la iniciativa política y presentar su siguiente iniciativa.
El Ejecutivo aprovechó un acto de partido el domingo en Córdoba para anunciar un proyecto de ley en el que se pretende ampliar los delitos con prisión permanente revisable. Fue el ministro de Justicia, Rafael Catalá, el encargado de defender esta medida que su partido llevará el viernes al consejo de ministros. Rajoy, que acudirá a todas las convenciones, se dejó fotografiar con padres de víctimas que reclaman este derecho para que los asesinos de sus hijos pasen más tiempo entre rejas.
La ofensiva del PP no termina ahí. Tras pasar por Galicia -donde el PP gobierna con mayoría absoluta- y Andalucía -autonomía donde se celebrarán las siguientes elecciones-, la siguiente convención programada será en Alicante el 17 de febrero. Se debatirá sobre pymes y autónomos, uno de los temas estrella de Ciudadanos. Los conservadores preparan ya otra medida con "golpe de efecto" que presumiblemente presentará la ministra de Empleo, Fátima Báñez.
Los conservadores utilizarán esta plataforma para reactivar la iniciativa de Gobierno y presentar medidas que le reconcilien con su electorado perdido. "Igual hay que perder el miedo a perder alguna iniciativa", reconocía el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo este lunes tras la reunión del comité de dirección nacional. Hasta ahora, Rajoy se amparaba en su minoría parlamentaria para cerrar cualquier acuerdo antes de llevarlo al Parlamento. Pero eso ya es cosa del pasado. Ahora está dispuesto a tramitar proyectos de ley aunque el Congreso tumbe y las iniciativas caigan en saco roto.
Conciliación familiar
Las iniciativas que presentarán no terminarán ahí. Para el fin de semana del 24 y 25 de febrero, los conservadores se reunirán en Zaragoza para debatir sobre otro espinoso asunto: la conciliación familiar. Será el turno de la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Dolors Montserrat aprovechará su intervención para hacer una suculenta propuesta. Es una bandera en la que también el partido de Albert Rivera le saca ventaja al PP. Ciudadanos fió su apoyo a los Presupuestos de 2018 a cambio, entre otras medidas, de ampliar hasta las cinco semanas la baja paternal.
El Partido Popular quiere mimar también a sus votantes más fieles: los mayores. Para ellos estará dirigido la convención llamada igualdad de oportunidades en el medio rural. Hay veinte millones de españoles que viven en localidades con menos de 20.000 habitantes y el PP buscará fórmulas para reconectar con ellos. "Queremos profundizar en aquello que les preocupa", reconoció Maillo.
El retrato de Cs
Los últimos datos del CIS han sido esperanzadores para el PP, que saca pecho de que siguen siendo el partido preferido por los españoles. Conscientes de que la tendencia es que la formación pierde apoyo ciudadano, el objetivo de este ejercicio es rearmarse para reconquistar el terreno perdido. Los conservadores también está ultimando convenciones de turismo y medio ambiente e impulsará un gran pacto por el agua.
Además de retomar la iniciativa legislativa, los conservadores quieren obligar a sus rivales políticos a retratarse. "Ciudadanos es el campeón de la abstención. En cuanto hay algún problema se quitan de en medio", adelantó Maillo. Su nueva táctica girará a partir de ahora en esto: presentar iniciativas para que los grupos parlamentarios -sobre todo Ciudadanos- se retraten con su voto.