La renuncia de Alberto Núñez-Feijóo para disputar la batalla por la sucesión de Mariano Rajoy ha movido todo el tablero político del Partido Popular. El paso atrás del sucesor natural del presidente activó inmediatamente el plan b: que Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal presentaran sendas candidaturas. Ante este panorama donde se espera "una guerra sin cuartel", Pablo Casado emerge como la tercera vía en la que pueden converger distintas almas del PP que creen que ni Santamaría ni Cospedal representan la renovación que el partido necesita.
Todas las miradas siguen puestas en Galicia. En todos los estamentos del PP se hacen la misma pregunta: "¿A qué candidatura apoyarán los que hasta el lunes brindaron su apoyo a Feijóo?". Una vez apartado de la carrera sucesoria, el gallego ha pasado gran parte de este martes contactando con barones y afines que le expresaron su apoyo para dar explicaciones.
Cuesta mucho entender en un Partido Popular poco acostumbrado a la incertidumbre que Feijóo haya dado el portazo "justo cuando está el plazo de inscripción abierto. Si tenía dudas, se pudo retirar mucho antes", critican. Un barón autonómico cuyo referente era el gallego recuerda ahora las palabras que les dirigió Mariano Rajoy en Génova cuando anunció su retirada: "Dijo a todos que había que pensar en los intereses generales más que en los particulares. Y todos entendimos que le decía a ellas que no dieran el paso y a Feijóo que lo diera". No sucedió ni una cosa ni la otra.
Ante este panorama incierto, pocos se atreven a pronosticar qué pasará de aquí hasta el 21 de julio, el día que el nuevo presidente del Partido Popular dé su primer discurso ya como líder del partido conservador. "Todo va a depender de cuántas cuchilladas se vayan a dar ellas estos días", reflexionan desde distintos territorios.
En el PP cada vez son más las voces que creen que Pablo Casado tiene opciones reales de ganar "si arregla cuanto antes esto de su máster". De momento, el vicesecretario de Comunicación cuenta con el aval de "miles de militantes" que han querido depositar su confianza en él y que hará público este miércoles. El mayor poder que aglutina Casado procede de Nuevas Generaciones y prácticamente todos "los menores de 40 años, que creen que la renovación total es la de Casado, no la de Cospedal ni la de Santamaría". Tampoco hay que olvidar que creció junto a la expresidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, y del expresidente del Gobierno José María Aznar. Dos figuras ahora apartadas de la primera línea política pero con influencia todavía en una parte del PP.
Qué candidatura engordará más es todavía un misterio, pero el 'clan Feijóo' puede finalmente decantar la balanza para que una candidatura sea la triunfadora. Fuentes del entorno del presidente gallego prefieren mostrarse cautos a la hora de desvelar sus cartas, pero no esconden su afinidad con Casado. Como muestra, dan un solo dato: Pablo Casado fue el único miembro de la dirección nacional del PP que hizo campaña con Feijóo en Galicia y el presidente gallego solo fue en las elecciones generales a una provincia, Ávila, con Pablo Casado.