"Puede sonar presuntuoso, pero espero que esta vez sea al revés y nos brinden el apoyo a nosotros". Palabras de Juan Marín (Sanlúcar de Barrameda, 1962), de nuevo candidato a presidir Andalucía tras ganar las primarias con un 67% de los votos. Con las encuestas en la mano, Ciudadanos quiere dejar de ser muleta en la región para empezar a torear: "Aparecemos como segunda fuerza y por encima del PP".
Albert Rivera ha volcado en el sur el grueso de los recursos de su partido. La Ejecutiva de la formación considera "altamente probable" que Susana Díaz adelante a este otoño las elecciones. "Es una oportunidad histórica. Podemos hacer lo mismo que en Cataluña", expresa Marín en conversación con este periódico. Una aspiración que le granjea el adjetivo de "ingenuo" en el PSOE. Los socialistas llevan gobernando la Junta desde 1982, cuando se celebraron sus primeros comicios -hace 37 años-, algo que sólo ocurre allí. "Por primera vez, los andaluces tienen una alternativa sólida", aseveró Rivera en Sevilla durante la presentación de su equipo la semana pasada.
Según las fuentes consultadas por este diario, tanto el presidente del partido -su madre es andaluza- como Inés Arrimadas -nacida en Jerez- participarán en la campaña con varias visitas. Los críticos arguyen que se trata de compensar el carácter poco mediático de Juan Marín, pero él rebate: "El CIS andaluz dice que soy el líder mejor valorado. Algo habré hecho bien".
Relojero, joyero y técnico de voleibol, Marín entró en política a través de un partido de vecinos independientes. Hasta que Ciudadanos lo fichó como líder en 2015. En su debut electoral, se hicieron con nueve diputados, que actualmente son ocho tras la baja de uno de ellos camino de los no adscritos. Para formar gobierno deben sumarse 55 -contando los posibles apoyos- de un total de 109. Y los últimos sondeos sitúan a Cs entre los 23 y los 25.
Marín, en conversación con EL ESPAÑOL, pronostica "un escenario muy diferente". "Hemos terminado de implantar nuestra infraestructura en todas las provincias. No tiene nada que ver con lo que fuimos en 2015. Ahora podemos llegar a más del 95% del electorado".
¿Por qué Susana adelantará las elecciones?
Aunque los sondeos aúpan a Ciudadanos, el partido preferiría que Susana Díaz no adelantara las elecciones: "Somos partidarios de que agote la legislatura por una cuestión de estabilidad y crecimiento. Tenemos Presupuestos y no queremos que se queden sin ejecutar". Cs, con Marín al frente, hizo posible la investidura de la actual presidenta. Pero, ¿qué queda de aquel acuerdo? "Igual que Sánchez en Moncloa, Susana Díaz no ha querido abordar todo lo que tiene que ver con la limitación de mandatos, la eliminación de los aforamientos, la reforma de la ley electoral... Aunque sí ha cumplido en la rebaja del IRPF o la reforma del impuesto de sucesiones".
En cualquier caso, diagnostica Ciudadanos, tanto la vertiente política como la judicial empujarán a la presidenta a adelantar las elecciones. "Ella solía tapar los agujeros de su gestión con la excusa de la financiación autonómica, decía que Rajoy no daba a Andalucía lo que merecía, pero ahora el presidente es del PSOE y también le ha dicho que no. Se ha quedado sin excusa. La veo muy descolocada, fuera de sitio... ¡Y por culpa de su partido!", reseña Marín.
Para el líder de Cs, Sánchez le está complicando las cosas a Susana Díaz con algunas decisiones. Anota el acercamiento de los presos catalanes, la posibilidad de hacer lo propio con los etarras, las "concesiones a los nacionalistas"... y zanja: "Eso no le va bien al electorado socialista andaluz". Le va bien a Cs.
Por otro lado, los nubarrones de la corrupción por el caso de los ERE podrían dejar caer la lluvia en campaña electoral si no hubiera un adelanto: "No hay fecha, pero nos dicen que la sentencia podría publicarse en la próxima primavera".
Apoyar al PSOE en 2015 permitió a Ciudadanos esgrimir su carácter centrista. Ahora, Marín vuelve a calificar de "posibles" las negociaciones con derecha e izquierda -sólo veta a Podemos-, aunque se sitúa en posición "ventajosa" y de exigir. Si Cs quiere ganar, deberá obtener cerca de veinte escaños más que hace cuatro años.