No solo el caso máster está empañando el primer mes de la nueva era de Pablo Casado al frente del Partido Popular. Los pinchazos telefónicos de la Operación Enredadera, una investigación impulsada por la UDEF, colocan al alcalde de León en una difícil situación. Antonio Silván, incluido en el Comité Ejecutivo Nacional aprobado en el último congreso, aparece en unos pinchazos telefónicos revelando información privilegiada sobre el desarrollo de unas mesas de contratación al empresario José Luis Ulibarri, en prisión provisional implicado en la trama que investiga supuestos amaños en sistemas de gestión de tráfico en diversos municipios.
El caso se ha llevado por delante al 'número tres' del Ayuntamiento de León, José María López Benito, conocido como Yiyo, al ser imputado en la causa. El concejal ha tomado la decisión este martes después de que el PSOE amenazara con lanzar una moción de censura contra Silván. Los socialistas ya contaban con el apoyo de Podemos y Ciudadanos le dio un ultimátum: abrir una comisión de investigación y expulsar ya al compañero imputado por supuestamente facilitar información a la trama.
Con la dimisión de Yiyo Silván gana tiempo y, de momento, ha conseguido que la moción de censura no prospere. El Partido Popular se escuda en que no está imputado para mantenerlo en la cúpula del recién renovado partido. Silván se ha escudado en que "habrán podido grabar mil conversaciones, pero ninguna en la que ofrezca nada ilegal" para mantener que es inocente y que no ha cometido ningún delito.
De momento, en el Consistorio leonés se abrirá una comisión de investigación para esclarecer los hechos mientras la juez instructora del caso avanza en las pesquisas. Antonio Silván disputó la presidencia del PP en Castilla y León al alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, que se hizo con el control del partido en el último congreso.
En las disputadas primarias para hacerse con el control del PP tras la dimisión de Mariano Rajoy, el alcalde de León apoyó la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría. De hecho, la exvicepresidenta obtuvo en la votación del 5 de julio más de la mitad de los votos de toda la provincia: 427 de las 830 personas que votaron apostaron por ella.
Con el triunfo definitivo de Casado, Silván fue uno de los nombres que el nuevo presidente incorporó en su Ejecutiva gracias a la recomendación que le hizo el todavía presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. Era uno de los nombres de la famosa integración que tanto ha costado a la nueva dirección del PP.
Ahora, en Génova se echan las manos en la cabeza por lo que pueda venir y entienden que la oposición lo va a utilizar como "arma arrojadiza" para "seguir embarrando" al Partido Popular. Pero las normas son las que son y los conservadores dicen que una persona será apartada cuando haya apertura de juicio oral contra él e indicios de una posible conducta irregular.