"Es importantísimo desalojar del poder a quienes gobiernan hoy en Navarra. Por eso hacemos una excepción y no vamos con nuestras siglas, igual que hace UPN. Sumamos desde la gravedad de la emergencia y sin entrar en contradicción con nuestro ideario", asegura Juan Carlos Girauta en declaraciones a EL ESPAÑOL valorando el pacto sellado este martes en Pamplona con los regionalistas navarros.
El portavoz parlamentario de Ciudadanos rechaza las críticas de quienes ven un cambio de posición de su partido en relación al régimen foral: "La posición de Ciudadanos con el régimen foral es la posición de siempre: lo asumimos mientras esté en la Constitución, porque somos un partido constitucionalista. Somos conscientes de la dificultad de conseguir mayorías para cambiarla, posiblemente los que más, porque cuando se votó el cuponazo vasco nos quedamos solos votando en contra".
Girauta considera que lo mejor que puede hacerse con las fiscalidades especiales del País Vasco y Navarra es conseguir que sean transparentes. "El régimen foral existe, es constitucional y lo que podemos lograr ahora es que sea transparente. Se puede servir al fin de la solidaridad interterritorial calculando las aportaciones de esos territorios de manera transparente y solidaria, lo contrario de lo que se ha hecho siempre, por cierto, con el cupo vasco", insiste.
El dirigente de Cs asegura que lo capital hoy en Navarra es propiciar el cambio político. "Hacemos este acuerdo [con UPN] contra el predominio de las fuerzas separatistas, instaladas en la pedagogía del odio a España, de la desaparición de la simbología del Estado, de la euskaldunización... Tenemos que sumar contra los que buscan activar la anexión", declara.
Barkos, por un escaño
En las últimas elecciones forales, Ciudadanos se quedó a las puertas de lograr su primer y único parlamentario. De haberlo conseguido, hoy gobernaría el constitucionalismo y no Uxue Barkos. La fragmentación en el centroderecha supuso entonces el fracaso de las fuerzas contrarias al nacionalismo. Esta realidad ha pesado en las negociaciones entre Cs y UPN, y al final han primado la defensa de la unidad de España respecto a las diferencias entre ambas formaciones.
En el acuerdo firmado en Pamplona con UPN, ambas formaciones se comprometen a unir fuerzas para reivindicar la eliminación de la disposición de la Constitución que permite la incorporación de Navarra al País Vasco mediante referéndum.