El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido "la fuerza necesaria" para "gobernar con las propias fuerzas del PSOE", este sábado en Tenerife. En un mitin celebrado en la Pirámide de Arona, junto a Ángel Víctor Torres, líder socialista canario, Sánchez ha acusado a "las tres derechas" de ser lo mismo y que "los tres temores" que provocan deben ser derrotados el próximo 28-A. "Estamos muy cerca de esa victoria necesaria para dar estabilidad nuestro Gobierno", ha dicho Sánchez ante unas 1.200 personas.
El presidente ha sugerido que "las lecciones que da el PP sobre constitucionalismo" no se sostienen porque "la declaración de independencia unilateral de los separatistas la hicieron con Mariano Rajoy en Moncloa". De hecho, ha presumido de que la democracia española es "según los organismos internacionales, mejor que Francia o Italia", y que es "el tercero del mundo en esperanza de vida, el mejor para vivir".
En todo caso, Sánchez ha lanzado una "mirada crítica" a España. "Miramos al futuro, para mejorar este país" y no mirar atrás, a esa "ultra derecha que siempre existió, que Blas Piñar ya estaba al inicio de la democracia con Fuerza Nueva", porque, ha recordado, siempre han estado, "dentro o fuera del PP". Para el presidente y candidato socialista "existe el riesgo de que las tres derechas, que representan corrupción, desigualdad e injusticia social" puedan gobernar.
Sánchez se ha mofado de Adolfo Suárez Illana, "tras hablar de la prehistoria lo han escondido" y ha abundado en la confusión alrededor de la propuesta de pensiones del PP, atribuyendo a su número cuatro por Madrid, Daniel Lacalle, la iniciativa de "privatizar un derecho y querer recortarlas". Sánchez ha prometido blindarlas a través de una reforma constitucional.
"Convivencia, justicia social y limpieza"
Sánchez ha prometido "un Consejo de ministros en las islas" para demostrar su "compromiso" con las Canarias, y varias medidas en "justicia social". Entre ellas, la elaboración de un nuevo estatuto de los trabajadores, la aprobación de una "ley de igualdad laboral entre hombres y mujeres", y añadir la salud bucodental al catálogo de servicios de la Seguridad Social.
Además, Sánchez, pero sin entrar en detalles, ha prometido "el mayor parque de vivienda social" para lograr que los jóvenes puedan emanciparse "a los 20 años" y no a más allá de los 30 "como ocurre ahora en España".
También ha dado algunas pinceladas sobre las medidas que promete "en limpieza democrática" si tiene una mayoría suficiente para gobernar a partir del 28-A. El candidato a la reelección ha prometido, ahora sí, "derogar la ley mordaza y reformar la Constitución para acabar con los aforamientos de los diputados".
Curiosamente, el tercer apartado de sus propuestas se ha quedado sin desarrollar. Las promesas en el campo de la convivencia y la solución del conflicto territorial se han quedado en nada. Sánchez no ha querido dar detalles y se ha limitado a recordar que los separatistas y "las tres derechas" son igual de culpables ne su opinión de la situación.
Para acabar, el presidente ha pedido a los asistentes que cumplan con el lema y "hagamos que pase". Porque para Sánchez "es un honor poder liderar a tu país", ha dicho, "pero no es menor el honor que siento de ser el secretario general del PSOE", reuniendo enormes aplausos. Nuevamente, el presidente ha presumido de los 140 años de historia del Partido Socialista y ha pedido que como regalo de cumpleaños del partido, "nos demos la alegría de ganar las elecciones del 28 de abril y del 26 de mayo".