Las mujeres españolas no apostaron de manera mayoritaria ni por Vox ni por Unidas Podemos en las elecciones generales del 28 de abril. De hecho, fueron los dos partidos que menos votaron. En el caso de Vox, tan sólo obtuvo un 28% de apoyos femeninos y 767.456 votos. Tampoco Unidas Podemos, que precisamente cambió su nombre para reivindicar el espacio de las mujeres, obtuvo buenas cifras entre las féminas. Los apoyos al partido se quedaron en un 35,9% y 1.341.521 votos. 

El Partido Socialista fue el más votado por las mujeres con un 54,8% de apoyos y 4.097.849 votos, seguido del Partido Popular con un 55,5% y 2.416.232 votos y Ciudadanos, con un 48% y 1.983.880 votos.

Son los resultados del análisis post-electoral elaborado por SocioMétrica para EL ESPAÑOL, del que se extrae que las mujeres españolas apostaron más por los dos partidos tradicionales (PSOE y PP) con representación en el Congreso de los Diputados. Después de éstos, el voto femenino fue a parar a Ciudadanos, el único donde crecieron los apoyos femeninos con 533.558 votos más que en las elecciones de 2016.

El fracaso de Vox, partido de ultraderecha, encontraría explicaciones lógicas: su posicionamiento en contra de la Ley de Violencia de Género, los mensajes claramente machistas vertidos por algunos de sus miembros durante la campaña y la presencia de candidatos condenados por maltrato en sus listas (después apartados) explican ese rechazo de las mujeres a votarles. 

El caso de Podemos es más complicado de comprender, pues es el partido que más ha intentado posicionarse al lado de las reivindicaciones de las mujeres y que da alta importancia en su programa a las medidas contra la violencia machista. Sin embargo, la figura de Pablo Iglesias como líder indiscutible, que adelantó su incorporación de la baja por paternidad con un cartel de campaña bajo el lema 'VuELve', fue muy criticado en los círculos feministas.

Ningún partido 'feminista' por antonomasia

De los datos arrojados por el análisis de SocioMétrica se desprende también que ningún partido político representa especialmente a las mujeres, sino que los porcentajes de votantes varía de manera significativa entre unas formaciones y otras.

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De esta manera, el voto femenino no fue determinante para que la izquierda ganara las elecciones generales del 28 de marzo, como se ha llegado a afirmar en ámbitos periodísticos y políticos. Al menos no fue decisivo por sí mismo. 

Según el análisis de SocioMétrica, sin los cerca de 3,4 millones de hombres que se decidieron por el PSOE, Pedro Sánchez no habría conseguido 123 escaños. Es más, el voto femenino fue conservador en comparación con el masculino, pues ellas apostaron por los tres partidos más situados en el centro, PSOE, PP y Cs.

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Haciendo una comparativa entre los comicios de 2016 y los de este abril, el número de mujeres que confiaron en el PSOE ascendió en 896.000 votos. Las que dieron su confianza a Cs fueron 533.559 más y las que se la quitaron al PP ascendieron a 1.867.028. En cuanto al partido de Pablo Iglesias, perdió 484.978 apoyos de mujeres.

Respecto a los hombres, la lista del PSOE obtuvo 1.159.112 votos más que en 2016. El único partido que también creció en número de votos masculinos fue Cs, con 479.272 más. También entraron fuerte, con 1.909.717, los votos de Vox. 

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Por su parte, 831.826 hombres menos votaron a Podemos respecto a 2016 y el mayor batacazo del voto masculino respecto a las anteriores elecciones se lo llevó el Partido Popular, con 1.683.134 votos menos.