“Estamos en una nueva fase”. En Vox ahora se muestran “cada vez más optimistas” porque entienden que Ciudadanos ha levantado “por fin” los “cordones sanitarios”. Los liberales ya se reúnen y hablan con “normalidad democrática” con los de Santiago Abascal, celebran a este periódico fuentes cercanas al partido de la nueva derecha.
Sentarse a hablar es, según reconocía este jueves el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, la primera condición para poder caminar “en el buen sentido”, tanto en la Comunidad de Madrid como en la Región de Murcia. Los votos de Vox son necesarios para alumbrar un gobierno de PP y Cs en ambas comunidades. Y después de semanas de bloqueo en las conversaciones, las declaraciones del número tres del partido, unidas a las distintas reuniones a nivel autonómico, allanan el camino para desatascar en las próximas semanas las investiduras de Isabel Díaz Ayuso y Fernando López Miras.
Condiciones más suaves
La segunda condición pasa por “llegar a algún tipo de acuerdo” y la tercera “buscar la manera de presentarlo”, es decir, ver “cómo se documenta”. En este último aspecto es donde desde Vox rebajan sus demandas, suavizándolas hasta el punto de que ya no se exige a Ciudadanos firmar un acuerdo a tres, con un documento donde aparezcan los membretes de los partidos implicados. Es más, Espinosa de los Monteros prometía que a partir de ahora se mostrarían “muy flexibles y muy sencillos” con PP y Cs porque la presentación de los acuerdos es para ellos “el último de los escollos”.
“Si hay que hacerlo de una manera que a los demás partidos suponga un menor desgaste, buscaremos una fórmula que sea satisfactoria para todos”, manifestaba el dirigente de Vox, en alusión a la formación de Albert Rivera, cuya ejecutiva prohibió en su hoja de ruta cualquier pacto con la extrema derecha para gobernar. Y para salvar ese veto Vox podría aceptar “otras formas de implementar esos compromisos”, explican fuentes cercanas al partido verde. El objetivo es que "los tres partidos estén satisfechos".
Este nuevo discurso contradice el que mantuvo semanas atrás la candidata de Vox a la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio. En su documento Tres condiciones, tres principios, aseguraba que sólo daría sus 12 votos a un gobierno que “suscriba abiertamente un acuerdo con Vox” donde “las tres partes firmen un programa único común”. Ahora las formas que permitan alcanzar ese pacto no son una prioridad para Vox, según puntualizó Espinosa de los Monteros.
La fórmula del PP para pactar con Cs y Vox
De hecho, en esa vía intermedia que Vox podría asumir para satisfacer a Ciudadanos, el PP ha propuesto que los compromisos del acuerdo entre los tres partidos queden reflejados en el diario de sesiones de la Asamblea en lugar de firmar un programa de gobierno. Es decir, que los contratos del PP, Cs y Vox para la legislatura sean pronunciados por cada uno de los candidatos en el pleno de investidura y queden recogidos en el diario de sesiones. Ese texto serviría como una suerte de documento que obligaría a los tres partidos a cumplir.
El portavoz de Cs, Ignacio Aguado, ha considerado "razonable" ese método. Los mandos del partido de Abascal ni lo han pensado. “No estamos en eso ahora, pero es una opción que estudiaremos”, valoran fuentes del partido de Abascal a EL ESPAÑOL.
Hablar es un "avance"
“Es evidente que por lo menos se está hablando”, aplauden a este periódico fuentes del entorno de la formación de derecha radical, en referencia a los últimos encuentros entre los líderes regionales de PP, Ciudadanos y Vox. En Madrid, la primera cita oficial, con foto incluida entre las candidatos de las formaciones, tuvo lugar el martes. La reunión terminó sin acuerdo, con un pleno de investidura sin candidato que puso en marcha el reloj parlamentario. Si para el 11 de septiembre no hay nuevo inquilino en la Puerta del Sol, se repetirán las elecciones.
En Murcia, en cambio, la situación avanza mejor. Este jueves se reunían por tercera vez los equipos negociadores. Por parte del PP acudió el candidato a la presidencia, Fernando López Miras, junto a Joaquín Segado y José Miguel Luengo; por parte de Cs el diputado nacional Miguel Garaulet y la portavoz en la Asamblea, Isabel Franco, y por Vox estuvieron el coordinador del partido, Luis Gestoso, y portavoz parlamentario, Pascual Salvador.