Dolores Jiménez es quién protagoniza esta historia tan insólita como humana. Su situación está llegando al límite, ya que si no devuelve el pago completo de una deuda hipotecaria que le reclama un fondo bancario, será desahuciada el próximo lunes, día 14 de octubre.
El banco le exige una deuda de 20.000 euros por intereses y demoras después de que le concedieran una hipoteca con opción a compra a través de dación en pago. El problema está en que ella firmó la hipoteca con un banco que quebró, y el que se hizo cargo de su deuda le reclama el dinero que el anterior no lo hacía.
Esta situación podría ser una de tantas, pero el caso de Dolores Jiménez, vecina de la localidad andaluza de Bormujos, es diferente ya que sufre una discapacidad que le impide trabajar, su marido está en paro y tiene un hijo menor de edad, lo que le llevó a que el pasado 1 de octubre subiese un vídeo a redes sociales para pedir ayuda a sus vecinos. Muchos vieron el vídeo, también dos concejalas del Ayuntamiento, Yésica Vanesa Sposati (Adelante Bormujos, marca electoral de Podemos) y Carmen Cariciolo (Vox), que decidieron tomar cartas en el asunto.
Ambas dejaron sus diferencias ideológicas de lado y hablaron por teléfono esa misma noche, cuando Dolores publicó el vídeo por redes sociales y confirmaron que se acercarían a la mañana siguiente, por separado, al hogar de la vecina afectada. “Me presenté allí, me comentó la situación y la pude verificar con papeles y su abogada. A la hora y media apareció Yésica”, cuenta Cariciolo.
La relación entre ambas es tensa en el Consistorio, pero en esta ocasión actuaron, según afirma Carmen, como “personas normales”. “Cuando llegó Yésica le expliqué la situación de Dolores, y ella pudo hablar por teléfono con la abogada”, apostilla la concejala de Vox.
Mismo objetivo, caminos distintos
Al ver esta situación ambas decidieron presentarse en el Ayuntamiento para hablar con la socialista Leonor Benítez, concejala de Asuntos Sociales en esta localidad andaluza de 21.000 habitantes. Fueron, eso sí, en coches distintos: mismo objetivo pero cada una por su cuenta. La única respuesta que consiguieron por su parte es que el Ayuntamiento “está trabajando” en el asunto y un comunicado por parte del alcalde en el que afirma que ambos grupos aprovechan esta situación para hacer política. “Desde el Ayuntamiento dicen que saben de esta situación desde hace dos años. ¿De verdad el señor alcalde tiene que esperar hasta la última semana para resolver esta situación?”, se pregunta sorprendida Carmen Cariciolo.
La única forma que Dolores tiene para no ser desahuciada es un informe de Asuntos Sociales en el que se reconozca que Dolores no puede pagar tal cantidad y en el que además se impida ejecutar el desahucio, ya que la Junta de Andalucía adaptó esta vivienda a sus necesidades.
El día 10 se manifestarán enfrente del Ayuntamiento para evitar que esta situación acabe con el peor final posible y Dolores, “una mujer que es muy querida en la localidad”, pueda resolver su situación con el banco.