Torra e Ibarretxe, dos "pacifistas" unidos por una marcha para cortar la AP-7

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ha participado este miércoles por la mañana en el corte de una autopista, en concreto la AP-7, recorriéndola como un manifestante más en una de las llamadas "marchas de la libertad". Lo ha hecho acompañado por el exlehendakari Juan José Ibarretxe, ambos tras una pancarta en la que se leía 'Autodeterminación, libertad, basta de represión'.

No es la primera vez que se les ha podido ver juntos. En febrero, Torra e Ibarretxe rememoraron algunos de los pasos que dos de sus antecesores, Lluís Companys y José Antonio Aguirre, recorrieron en su camino al exilio al final de la Guerra Civil. Coincidieron en la masía Mas Perxés, a las afueras del municipio de Agullana (Gerona), próximo a la frontera, donde intelectuales y políticos coincidieron en 1939 antes de cruzar a Francia. 

Presidente y exlehendakari incidieron en sus discursos en lo que consideran una hermandad entre sus territorios. Torra recordó a los "presos políticos" -como se refiere a Oriol Junqueras y el resto de dirigentes en la cárcel por el procés- y defendió el camino hacia la secesión. A su lado, quien puso apellido al 'plan' para que el País Vasco tomara este rumbo mediante una reforma en el Estatuto de Autonomía, si bien éste lo expuso en el Congreso de los Diputados -año 2005-, que lo rechazó por mayoría absoluta.

Ibarretxe preside hoy día el Agirre Center, un instituto que tiene como fin "compartir internacionalmente el conjunto de decisiones y proyectos que han permitido a la sociedad vasca proyectarse como un modelo exitoso de transformación socio-económica". En sus intervenciones y comentarios en redes sociales suele referirse a la "república catalana", para la que pide "respeto y reconocimiento". Son varias las muestras de apoyo al expresidente Carles Puigdemont, huido en Bélgica.

Este miércoles, Ibarretxe ha querido dar un consejo a todos los que estas horas protestan en las calles enfadados con la resolución del Tribunal Supremo, a los que pide calma y unidad: "Os quieren violentos y divididos. La respuesta, pacifistas y unidos".