Varios dirigentes de Ciudadanos conciben que el camino hacia la supervivencia pasa por una coalición con el Partido Popular de cara a las elecciones vascas y gallegas, que se celebrarán en 2020. Este debate se abordará tras el Congreso de marzo, cuando Inés Arrimadas sea investida presidenta de la formación.
Mientras tanto, la política jerezana guarda silencio al respecto, aunque mantiene una estrecha relación con Pablo Casado. "Intercambian mensajes con frecuencia", relatan dos miembros de la organización naranja.
País Vasco y Galicia -a expensas de lo que suceda en Cataluña- serán los dos primeros desafíos electorales que aborde Arrimadas en calidad de líder. "No podemos permitir que Inés se queme en ruedas de prensa explicando cómo y por qué nos hemos vuelto a quedar fuera de esos dos parlamentos", razonan un par de altos cargos de Ciudadanos.
El calendario no juega a favor de los liberales. Al contrario. La primera prueba tiene que ver con los territorios donde las siglas jamás cuajaron, ni siquiera en los tiempos de mayor auge del proyecto. Ahora eso no ha cambiado. Incluso ha ido a peor. Se carece de candidatos y de infraestructura. "No nos podemos negar. Sería interesante explorar el camino de España Suma", narra un miembro de la última Ejecutiva. "Ya lo hicimos en Navarra y, aunque no gobernemos, creo que fue una decisión acertada", apostilla otro.
Aunque el todavía secretario general de la gestora de Cs, José Manuel Villegas, haya desechado esta opción, afirmado en una entrevista con Europa Press que su partido sigue decidido a presentarse con su propio proyecto a las autonómicas de Galicia y País Vasco, lo cierto es que el plan -aún incipiente- está sobre la mesa. "Yo creo que hay espacio en España para una propuesta autónoma y liberal, de centro", ha defendido Villegas. Hay que recordar que quien fuera mano derecha de Albert Rivera está en un puesto interino, "haciendo el último servicio" a su partido y que tras el congreso de marzo dejará la política.
Rivera aceptó desdibujar su marca en la Comunidad Foral porque, allí, el PP también es un actor absolutamente secundario. En la actual coalición, Navarra Suma, quien lleva la batuta es UPN. La dirección de Ciudadanos en el País Vasco negoció con los de Casado a espaldas del exlíder, que abortó la operación en cuanto se enteró.
El contexto ha cambiado. Ciudadanos no tiene 57 escaños, sino 10. Y Arrimadas "no debe" enfrentarse a dos nuevos batacazos al poco de asentarse en la presidencia del partido. "Si no aceptamos esa fórmula, ¿qué hacemos? ¿No nos presentamos?", desgrana un tercer dirigente. Según lo testado por este diario, la debilidad de Cs ha incrementado los partidarios de la operación.
"Oposición coordinada"
En el entorno de Arrimadas admiten que esta postura tiene su cuota dentro de la formación, pero reiteran que ese debate "no está ahora sobre la mesa". Reconocen, sin embargo, que llegará "después", cuando se inicie el mandato de la exlíder en Cataluña.
El Partido Popular, Cayetana Álvarez de Toledo a la cabeza, sigue apostando por esa refundición del centro derecha. Teodoro Garcia Egea, número dos, se cuidó de registrar todas las marcas por si acaso.
En las filas del PP vasco apenas existen resistencias a la unión con Ciudadanos, pero en Galicia la situación es distinta. Allí, impera la única mayoría absoluta de la que disponen los conservadores. La palabra de Alberto Núñez Feijóo podría ser definitiva en un sentido o en otro.
Desde la dimisión de Rivera, Arrimadas ha fraguado un Ciudadanos poco beligerante con el PP, en gran parte debido al modus operandi del Gobierno de Pedro Sánchez. Así lo reconocen hasta tres altos cargos del partido en charla con este diario.
En ese sentido, también son distintos los criterios que imperan en la plana mayor de los naranjas. Hay quienes creen que una actitud más dura con el PP les "abriría un verdadero espacio en el centro político". Pero Arrimadas ha escogido una especie de "oposición coordinada" con Casado. Así se refleja en la labor de su grupo parlamentario. "Creo que debemos explorar ese camino", concluyen las fuentes consultadas.