Alfonso Alonso ha presentado su dimisión como presidente del PP vasco, tras ser apartado por Pablo Casado como candidato a lehendakari de los populares y haberlo sustituido por Carlos Iturgaiz. El ya expresidente de los conservadores en el País Vasco ha presentado su renuncia irrevocable en la Junta Directiva que su partido celebra durante la tarde de este lunes en Vitoria. Ante sus compañeros, el exministro de Sanidad ha desvelado que deja definitivamente la política. Ante la prensa, muy emocionado, ha reconocido que no sabe qué va a hacer a partir de ahora "porque esto no estaba previsto".
Alonso deja repentinamente el Partido Popular tras echar un pulso público a Génova por no haber contado con él para cerrar la coalición con Ciudadanos. Elegante en las formas, se ha guardado los reproches y solo ha tenido buenas palabras para sus compañeros y simplemente ha dicho que "creo que aquí ha habido una colisión entre dos maneras de entender la política y de entender nuestro partido, pero creo que el partido en el País Vasco se ganó su mayoría de edad hace tiempo".
El vasco era partidario de ir en coalición con Ciudadanos a las elecciones y así lo ha dicho, pero no consintió que la dirección nacional le impusiera la fórmula y le exigiera regalar dos puestos de salida a los naranjas, invisibles en el Parlamento autonómico.
El exministro de Sanidad, que en las primarias que Pablo Casado disputó a Soraya Sáenz de Santamaría apoyó públicamente a la exvicepresidenta, no toleró enterarse por la prensa por los detalles del acuerdo y aireó públicamente la mala sintonía que mantiene con la nueva dirección del partido.
En un principio, Alonso quería seguir siendo el candidato a lehendakari de ese pacto con Cs, pero en una reunión el domingo con el secretario general del PP, Teodoro García Egea, en el que nuevamente Génova le daba las listas electorales hechas y cerradas, Alonso solo vio una puerta abierta: la de la salida.
El que fuera portavoz en el Congreso con Mariano Rajoy de presidente ha decidido anunciar su marcha definitiva rodeado de los suyos. Pablo Casado intentó apagar el fuego abierto este domingo anunciando en apenas unos minutos que su sustituto será Carlos Iturgaiz. El que fuera presidente del PP vasco durante los ocho años que gobernó José María Aznar, que cosechó los mejores resultados electorales de los conservadores en la región, tiene una dificilísima misión: mantener los paupérrimos resultados que tiene hoy el PP en el País Vasco.