El número de contagiados por coronavirus se ha disparado hasta tal punto que los gobiernos autonómicos con más afectados, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, han empezado a tomar medidas drásticas para evitar la propagación del virus.
A última hora de este lunes, España ya contabilizaba 1.209 casos diagnosticados, 29 de los cuales desembocaron en muerte. La mitad de los afectados (577) están en Madrid, la comunidad que ha ordenado el cierre de todos los centros educativos a partir del miércoles como primera medida combativa para frenar la expansión del virus. En el País Vasco habrá también un cierre parcial de centros educativos.
El presidente del Gobierno presidió este lunes por primera vez la reunión de seguimiento en el Ministerio de Sanidad, y el Ejecutivo ya estudia qué medidas llevará ahora al Consejo de Ministros para su inminente aplicación.
Tras comprobar la rapidez con la que el virus se ha propagado, Pedro Sánchez ha contactado con los líderes de los principales partidos políticos: Pablo Casado (PP), Santiago Abascal (Vox) e Inés Arrimadas (Cs), a los que ha pedido unidad en un momento de máxima alerta.
El jefe del Ejecutivo ha hablado también de esta crisis sanitaria mundial con la canciller alemana, Angela Merkel; el primer ministro italiano, Giuseppe Conte; la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen; y el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Grandes acuerdos
Los líderes de la oposición han propuesto a Sánchez acuerdos de Estado ante esta emergencia nacional. Pablo Casado ha dedicado su Comité de dirección de este lunes a diseñar un plan de choque con diez medidas económicas para que el Gobierno las analice y las ponga en marcha, y este martes acudirá a la Comisión de seguimiento y evaluación del coronavirus con los vicesecretarios Cuca Gamarra, Elvira Rodríguez y Jaime de Olano.
Casado pide reducir a "la mitad del impuesto de sociedades a los sectores afectados, sobre todo el turismo"; aplazar el cobro del IVA a las empresas afectadas, "devolver los 2.500 millones de euros adeudados a las comunidades autónomas para que tomen medidas", un plan de contingencia sanitario y aprobar un fondo de garantía para pymes. Además, pide cancelar la "contrarreforma laboral", aprobar una "partida extraordinaria para financiar el coste de bajas por aislamiento y la reducción de jornada no recaiga en los trabajadores y las empresas" y aplazar los pagos de cotizaciones de la Seguridad Social.
Arrimadas, por su parte, ha pedido a Sánchez un acuerdo nacional, un plan consensuado entre Gobierno, ejecutivos autonómicos, grupos parlamentarios, profesionales, expertos sanitarios y agentes sociales para "trabajar juntos" por el objetivo común de erradicar la propagación del virus.
Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, ha quitado trascendencia a los efectos de la epidemia y ha asegurado que no afectará a la tramitación y presentación de los Presupuestos Generales del Estado porque sólo estamos ante una "crisis transitoria".
Se mantiene el plan
Además ha asegurado que no cabe extrapolar la situación que se vive en otros países a España. "No veo porqué esta crisis tendría que paralizar medidas que necesita el país", ha subrayado, dando a entender que los planes del Ejecutivo siguen intactos.
Tanto el PP como Ciudadanos han solicitado la comparecencia urgente del presidente del Gobierno para explicar las causas y las consecuencias del coronavirus y calmar a la ciudadanía, inmersa en un profundo desconcierto por no saber qué nuevas medidas va a tomar el Ejecutivo a partir de ahora, una vez que dos comunidades han anunciado el cierre de colegios.
El ministro de Sanidad adelantó este lunes que el Gobierno tomará este martes nuevas restricciones respecto a si se puede asistir o no a espectáculos públicos, concentraciones deportivas o congresos, sin especificar más. También se evalúa restringir el transporte y la movilidad pública de los ciudadanos.
Los contactos de Sánchez con los líderes nacionales e internacionales llegan al mismo tiempo que dos gobiernos autonómicos han dado un paso al frente para frenar la expansión de la epidemia.
Cierre de colegios
Fue la Consejería de Sanidad del País Vasco la primera en anunciar el cierre de centros educativos en Álava, que es la provincia más afectada de la comunidad. A las pocas horas siguió la Comunidad de Madrid, pero aquí para cerrar todos los centros educativos desde el miércoles hasta el 26 de marzo.
"No ha sido fácil tomar esta decisión. Nos hemos comprometido a mantener la máxima lealtad política en esta difícil situación, tanto con los portavoces de los partidos como con el Gobierno central", aseguró la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. "La salud está por encima de todo".
Al mismo tiempo que la jefa del Ejecutivo madrileño anunciaba esta medida, el ministro de Sanidad pedía que hubiera un "especial cuidado higiénico" en los lugares de concentración de gente, como los transportes. Fuentes de la Consejería de Transportes de Madrid aseguraron a este diario que, de momento, no van a cerrarse las líneas públicas pero que la decisión final la tomará el departamento de Sanidad Pública en función de cómo evolucione la propagación.
Las medidas adoptadas este lunes en Madrid se suman a las que ya se tomaron el viernes, con el cierre de los 213 centros de ocio de mayores que existen en la Comunidad, como medida preventiva ante el riesgo inminente de que la propagación del virus se disparase.