El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visitado este viernes las instalaciones de la empresa Hersill, en Móstoles (Madrid), donde han comenzado a fabricarse respiradores para la lucha contra el Covid-19.
La fábrica va a producir a partir de hoy hasta cien unidades diarias de equipos de respiración asistida y Sanidad ha formalizado un contrato de 5.000 para que se entreguen en las próximas semanas.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció el jueves en su comparecencia en el Congreso que estas 5.000 unidades ya estaban en marcha.
La compañía madrileña ha tenido que multiplicar por diez su capacidad de producción con la cobertura del Gobierno para poder suministrar estos respiradores. Se trata del modelo Vitae 40, ya en uso en muchos centros hospitalarios, y que ha pasado la homologación de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS).
El anuncio del titular de Sanidad, sin embargo, no especificó muchos de los respiradores en fabricación no iban a poder utilizarse en un corto periodo de tiempo. En concreto, los que está produciendo Seat en su planta de Martorell.
La planta de Cataluña, que hace unos días paró la producción de automóviles, tenía previsto fabricar 300 respiradores, pero está esperando la homologación definitiva.
Desde hace un par de semanas, según informa el diario El Mundo, tiene un equipo de 150 personas trabajando en la esterilización del espacio para producir estos aparatos.
Trámites de comercialización
Los trámites para comercializarlo, como son homologar el producto y validar sus condiciones y lugar de fabricación, ralentiza el anuncio de Illa. El propio ministro aseguró que esperan recibir la "certificación sobre seguridad elíptica y test electromagnéticos necesarios para garantizar la seguridad" de los respiradores.
Por su parte, la AEMPS informó de que trabajan con seis proyectos, pero que algunos están todavía en fases más iniciales de su desarrollo.