El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha telefoneado este lunes por la mañana al líder de la oposición, Pablo Casado, para intentar convencerle de lo necesario que es que el Partido Popular vote a favor de la cuarta prórroga del estado de alarma, según han confirmado fuentes conocedoras del contacto.
El ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE ha revelado que la conversación entre los dos líderes ha durado una hora y quePablo Casado ha confirmado a Sánchez su intención de no apoyar más prórrogas. "Nadie ha expuesto un plan alternativo", afeó en rueda de prensa José Luis Ábalos, que insistió constantemente en la idea de que si el Parlamento no da luz verde a una nueva prórroga el miércoles para que el Gobierno gestione la desescalada, "nos situaríamos en una situación caótica".
Antes de la votación definitiva, Ábalos subraya el éxito incontestable del confinamiento para reducir considerablemente el número de contagios y carga sobre la espalda de la oposición toda la responsabilidad de las consecuencias sanitarias que traería el fin del estado de alarma antes de tiempo. "Esto que nos ha costado tanto esfuerzo se quedaría sin marco jurídico".
El no del PP
El presidente del PP ya se planteaba públicamente que su Grupo Parlamentario no apoye en el Parlamento la nueva prórroga de este estado de alarma, que extendería los plenos poderes del Gobierno en la gestión de esta crisis durante al menos dos meses. Este lunes por la mañana, el propio Casado aseguraba en una entrevista que ya no tenía ningún sentido prorrogar más este estado excepcional tras seis semanas de estado de alarma y pedía al Ejecutivo desvincular las ayudas a los ciudadanos de la prórroga. Unirlo en la misma votación era, a su juicio, tomar a los españoles como "rehenes" de su política.
El Gobierno, sin embargo, quiere tener el mando único hasta que finalice la fase de desescalada que comienza este mismo lunes. En caso de que el Parlamento no aprobase la cuarta prórroga, a partir del lunes Sánchez perdería los plenos poderes que le otorga este estado excepcional y los ciudadanos podrían circular de nuevo libremente por todo el país.
Falta comunicación
Sánchez llevaba sin contactar con el líder de la oposición trece días, desde el lunes 20. Antes de ese contacto, Casado y el presidente del Gobierno acumulaban 17 jornadas más sin contactar, desde el sábado 4. "Y ese día llevaba 13 días sin llamar, desde el lunes 23", resumían este sábado fuentes de la dirección nacional del PP para afear la conducta instaurada en Moncloa desde que se decretó el estado de alarma: aprobar cada medida sin consensuar con los grupos de la oposición ni con las comunidades autónomas que deben aplicarla.