Los españoles están divididos sobre la necesidad de extender el estado de alarma durante otros 15 días. Según el sondeo de SocioMétrica para EL ESPAÑOL, un 46,6% de los ciudadanos apoya mantener la medida de emergencia, mientras que un 46,2% no la apoya.
Se trata de una situación muy igualada entre partidarios y detractores, aunque ha bajado el número de ciudadanos que se oponían respecto al último sondeo, cuando éstos alcanzaban la mayoría, con un 50,4%.
El Gobierno de Pedro Sánchez ha tenido que negociar a diferentes lados de la cámara de representantes para lograr sacar adelante sus sucesivas prórrogas del estado de alarma.
Sus principales apoyos en la investidura en este episodio de la crisis de la pandemia no siempre le han brindado su apoyo. Si PNV ha amagado en más de una ocasión con desmarcarse, ERC se opuso cuando consideró que esta medida de excepcionalidad no respetaba la autonomía catalana.
El restablecimiento de puentes con ERC ha significado la derogación de mando único una vez se entre en la Fase 3 del plan de desescalada así como la recuperación de la mesa de negociación entre Cataluña y España a partir de este julio. En el caso del partido vasco, el Ejecutivo de coalición ha accedido a cederles la gestión del Ingreso Mínimo Vital así como la posibilidad de derogar unilateralmente el estado de alarma en la región.
Estas diferencias entre Comunidades Autónomas para el proceso de desconfinamiento ha suscitado el malestar de algunos ejecutivos autonómicos. La Comunidad de Madrid ya acusó el sábado a Sánchez de "maltratar" y "negar el pan y la sal" a la región, después de que también se rechazasen las medidas de flexibilidad de la Fase 1 que reclamó el Ejecutivo autonómico.
Polarización
Este desencuentro según el signo del Gobierno también se observa en la apreciación que tienen los españoles del estado de alarma según su orientación ideológica.
El vuelco testado cuando se pregunta a la masa social de la oposición da buena cuenta de la polarización política que ha traído la crisis del coronavirus. PP (91,3%) y Vox (94,2%) no quieren saber nada de la prórroga que deberá votarse en la Cámara Baja. Los votantes de PSOE (89,5%), Unidas Podemos (83,7%) y nacionalistas (61,5%), en cambio, son partidarios de apoyar la sexta prórroga.
Los de Ciudadanos vuelven a situarse en una posición intermedia en el debate: el 48% desaprueba la medida. De hecho, una de las grandes incógnitas que todavía existe para la votación del próximo miércoles es saber el sentido del voto de los de Inés Arrimadas.
Su acercamiento al PSOE ha sido “puntual” y, aunque sirvió para romper la política de bloques, no llegó a consolidarse. ERC amenazó con dejar caer el Ejecutivo por su entente con los naranjas y Sánchez ha vuelto a decantarse por la mayoría de enero que fraguó su investidura.
Ficha técnica
Se han realizado 2.226 encuestas a través de multiplataforma online, entre los días 27 y 30 de mayo, calibradas para el total nacional por sexo, edad, provincia, hábitat rural/urbano y situación laboral. Con posterior ponderación por recuerdo de voto en las elecciones del 10-N. La convergencia por interacción para el total nacional es del 97%. El margen de error es <3%.