Galicia es, desde hace más de una década, terreno inhóspito para los socialistas. Un páramo de votos. Un ramillete de batacazos electorales, a cada cual más sonado. ¿El culpable? Alberto Núñez Feijóo.
Desde que Feijóo llegó a la Presidencia de la Xunta, el 18 de abril de 2009, Galicia se ha convertido en un feudo inexpugnable para el PSOE. Y el presidente se ha erigido como uno de los barones populares más importantes. No en vano, llegó a sonar como posible sustituto de Mariano Rajoy al frente del Partido Popular: "Tengo que cumplir mis obligaciones como presidente de la Xunta", dijo declinando la oferta.
Su apuesta por un "galleguismo útil, cordial y constructivo" ha resultado ser una fórmula ganadora, a juzgar por los resultados electorales que ha cosechado durante ya más de una década. Feijóo se ha convertido en una máquina cosechadora de mayorías absolutas -van tres y camino de una cuarta- y una trituradora de candidatos socialistas.
En política, todo triunfo contundente implica grandes derrotas en el bando contrario. Esto lo saben bien los recientes dirigentes del PSdeG. Los tres últimos candidatos socialistas a presidir Galicia, quienes intentaron descabalgar a Feijóo, han tenido que buscarse la vida fuera de la política autonómica o directamente fuera de la política.
Gonzalo Caballero Míguez (Pontevedra, 1975) intentará no correr la misma suerte en las elecciones gallegas que se celebran el próximo 12 de julio, aunque las encuestas le auguran un destino no muy distinto al de sus predecesores. El PSdeG, según el último barómetro del CIS, obtendría el 19,5% de los votos. Un porcentaje muy lejano al 46% que lograría Feijóo.
Resultados de las elecciones gallegas según el último barómetro del CIS.
Sobrino del alcalde de Vigo, el también socialista Abel Caballero, el actual candidato del PSOE a la Xunta fue profesor del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Vigo. Ha escrito la friolera de 15 libros sobre economía y ciencia política, pero ha sabido compaginar su labor académica con su carrera política.
Gonzalo Caballero fue concejal en el Ayuntamiento de Vigo (2005-07). En 2009 ya intentó liderar el socialismo gallego, pero no logró suficientes avales. Tras una etapa muy convulsa en el partido, con concatenaciones de varapalos electorales, ganó las primarias de 2017. Ahora, se enfrenta a sus primeros comicios como candidato a presidir la Xunta.
Si todo transcurre según el guión establecido en Galicia en la última década, Gonzalo Caballero se convertiría en el cuarto cadáver que Núñez Feijóo deja a su paso. EL ESPAÑOL recuerda las otras víctimas políticas del presidente de Galicia.
Leiceaga, al Senado
Xoaquín Fernández Leiceaga, excandidato del PSdeG-PSOE a la presidencia de la Xunta de Galicia.
Xoaquín Fernández Leiceaga (Noya, 1961) ha sido la última víctima política de Feijóo en el seno socialista. El profesor titular de Economía Aplicada en la Universidad de Santiago de Compostela hizo las maletas con destino al Senado tras fracasar como candidato a presidir la Xunta. Ahora, vive una segunda vida política en la Cámara Alta.
En las elecciones al Parlamento de Galicia de 2016, cuando Fernández Leiceaga se presentó como candidato a la presidencia, el PSdeG obtuvo sólo el 17,8% de los votos, sufriendo el sorpasso de En Marea (19%), coalición que integra a Podemos, Anova y Equo, entre otras formaciones.
La victoria de Feijóo aquel año fue incontestable: 41 escaños y un 47,5% de las papeletas. Tras aquella sonora derrota, Leiceaga fue portavoz socialista en el Parlamento de Galicia... Antes de ser reubicado en el Senado.
Ahora, compagina su cargo en la Cámara Alta con la coordinación del programa para las elecciones autonómicas del próximo 12 de julio. "Mi empeño será colaborar hacia donde sea posible para producir el cambio político que Galicia necesita, ganar a Feijóo y sustituirlo por Gonzalo Caballero", declaró el excandidato socialista a presidir la Xunta.
Vázquez, nuevo partido
El exsecretario general del PSdeG, Pachi Vázquez.
Manuel Vázquez Fernández (O Carballiño, 1955), más conocido como Pachi Vázquez, llegó a ser una de las figuras más destacadas de la política gallega... Hasta el batacazo que sufrió en 2012, cortesía de Feijóo.
El PSdeG sufrió un auténtico descalabro en las elecciones autonómicas de aquel año, con Pachi Vázquez como candidato, pasando del 31% de los votos logrados en los anteriores comicios de 2009 a un decepcionante 20,6%.
Tras ese traspiés electoral, se marcó objetivos más mundanos: volver a la política local. Aunque su nueva andadura no se le dio todo lo bien que hubiese deseado. Vázquez fue candidato a la alcaldía de Orense con el PSOE. Tras no lograrlo, acabó abandonando las filas socialistas y fundando su propio partido: Espazo Común.
En mayo de 2019, quiso cumplir una última voluntad dentro de su extensa carrera política: ser alcalde de su pueblo natal. Para ello, un nuevo partido y una ilusión renovada. Sin embargo, el tiro le salió por la culata: el PSOE logró la mayoría absoluta y el exsocialista tuvo que abandonar sus pretensiones.
Ahora, la formación impulsada por Pachi Vázquez, Espazo Común, se presenta en coalición con Recortes Cero y Os Verdes. Aunque, tras multitud de sonoros fracasos, Vázquez ya no será candidato el 12-J.
Toruiño, dimisión
El expresidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño.
La primera víctima política de Alberto Núñez Feijóo. Y quizá la más relevante, por su envergadura política. Emilio Pérez Touriño (La Coruña, 1948) fue un activo militante de izquierdas durante la Transición. Primero, desde las filas de Bandera Roja y luego en el PCE. Participó de manera activa en el proceso de constitución del Estatuto de Autonomía de Galicia en 1979.
Entró en política de la mano de Abel Caballero, actual alcalde de Vigo y tío del candidato socialista a presidir la Xunta. Se afilió al PSOE en 1988, donde ascendió en el cursus honorum hasta que en 1998 fue nombrado secretario general del PSdeG.
Tras las elecciones gallegas de 2005, fue nombrado presidente de la Xunta gracias a un pacto con el Bloque Nacionalista Galego. Permaneció en el cargo hasta 2009, cuando Feijóo se presentó a sus primeras elecciones autonómicas. Entonces, el PP logró la mayoría absoluta con el 46,6% de los votos, mientras que Pérez Touriño alcanzó un insuficiente 31%. Dimitió ipso facto, al día siguiente, después de once años como secretario general del PSdeG.
Tras más de dos décadas, Pérez Touriño anunció su abandono de la política en marzo de 2010. Desde entonces, es miembro del Consejo Consultivo de Galicia y da clases en la Universidad de Santiago de Compostela.