Carles Puigdemont ha presentado hoy a la prensa su libro Me explico. De la investidura al exilio (Plaza & Janés). En él, el expresidente catalán desvela el contenido de la conversación que mantuvo con Pedro Sánchez el día 15 de marzo de 2016 y en la que este le sondeó, supuestamente, respecto a las condiciones para un referéndum de independencia para Cataluña.
El libro, el primero de dos volúmenes, ha sido escrito por el periodista Xevi Virgo, director del diario El Punt Avui, a partir de las conversaciones mantenidas con Puigdemont desde su investidura en enero de 2016 hasta su fuga a Bélgica en octubre de 2017. El segundo volumen comprende lo ocurrido desde su fuga hasta la actualidad, la etapa que Puigdemont llama "de la internacionalización del procés".
En el fragmento dedicado al 15 de marzo de 2016, el expresidente fugado de la Justicia describe la conversación que mantuvo con el por aquel entonces todavía secretario general del PSOE en su despacho del palacio de la Generalidad.
En dicha conversación, Pedro Sánchez, después de aceptar de su interlocutor la tesis de que en Cataluña no existe un "problema de convivencia" sino meras "discrepancias políticas", sondea a Puigdemont respecto a tres posibles opciones para desencallar el conflicto catalán: una reforma de la Constitución, un nuevo Estatuto y, finalmente, un referéndum de independencia en el que votaría "toda España".
La primera opción, la de la reforma constitucional, es descartada por Puigdemont frente a la evidencia de que el PSOE no contaría para ello con el apoyo del PP. La segunda opción, la del nuevo Estatuto, es también rechazada por Puigdemont con el argumento de que nadie en Cataluña pide un nuevo Estatuto, sino la independencia.
En toda España
Es en este punto cuando, según la versión de Puigdemont, Pedro Sánchez le sondea sobre la fecha y las condiciones en que desearía llevar a cabo un hipotético referéndum de independencia. "[Puigdemont] ha conseguido no sólo que Sánchez se ponga en modo referéndum, sino también que le pregunte incluso por la fecha y qué pasaría si no ganara la independencia", escribe Xevi Virgo.
Explica Puigdemont que, en ese momento de la conversación, Sánchez alegó el obstáculo de la soberanía nacional. "Puigdemont discrepa, y le explica que en España la soberanía puede ser asimétrica, que hay posibilidades legales de referéndum, y que él lo sabe", dice el libro.
"Pero si se hiciera el referéndum, debería votar toda España", le dice Pedro Sánchez, a lo que Puigdemont responde que eso no sería problema, siempre y cuando el resultado catalán fuera vinculante. Cuando Puigdemont le pide a Sánchez una oferta concreta, este le contesta: "¿Pero pondríais a votación de la gente nuestra oferta, si la hiciésemos, o también el referéndum?". "Las dos", contesta el presidente de la Generalidad.
Tras unos momentos de duda, en los que Sánchez confiesa que una condena contra Artur Mas por la convocatoria del referéndum ilegal del 9-N dejaría "muy tocada" la imagen de España, el secretario general del PSOE pregunta a Puigdemont por las condiciones del referéndum: fecha del plebiscito y años que deberían pasar hasta una nueva consulta, en caso de salir derrotado el independentismo.
Puigdemont se muestra dispuesto a la posibilidad de negociar ambos puntos y luego le impone a Sánchez una línea roja "innegociable": la inmersión lingüística. "Nosotros también lo tenemos claro", responde Sánchez, blindando así la discriminación del español en el sistema educativo catalán.
Sinceridad de Sánchez
Preguntado durante la presentación del libro por ese pasaje en concreto, Puigdemont ha negado que el presidente del Gobierno le prometiera un referéndum de independencia, algo que en cualquier caso era imposible dado que en ese momento Sánchez sólo era el líder de la oposición y no tenía por tanto potestad para ello.
"Él nunca me propuso hacer un referéndum, pero creo que su análisis era honesto. Una vez en el Gobierno, y sobre todo tras el discurso del Rey del 3 de octubre de 2017, él cambia de opinión", ha añadido Puigdemont. "Yo le di mucha credibilidad, y creo que Sánchez fue sincero", ha añadido el expresidente de la Generalidad.
"Creo que en aquel momento el secretario general del PSOE tenia una preocupación real, y que en el inventario de soluciones había coincidencias entre él y yo. El Pedro Sánchez de hoy seguramente no mantendría la misma conversación que entonces", ha dicho luego Puigdemont, que también ha incluido en el libro la conversación que mantuvo con Pablo Iglesias el 8 de abril de 2016.
Ese día, también en el Palacio de la Generalidad, Puigdemont le preguntó a Iglesias si "el tema del referéndum va en serio o es una estrategia electoral". "¡Pues claro que es en serio!", le respondió el hoy vicepresidente segundo del Gobierno.
"En España hay demócratas; y los hay que quieren un referéndum. O, mejor dicho, que lo entienden. Y cuando les digo que yo también lo quiero, pero para que Cataluña se quede, me entienden aún mejor", dijo entonces Iglesias, siempre según Puigdemont.
Según el expresidente de la Generalidad, el plan de Iglesias por aquel entonces era gobernar junto a Bildu en el País Vasco y crecer en Galicia, Cataluña y la Comunidad Valenciana con un discurso favorable a un referéndum de independencia. De creer a Puigdemont, Iglesias se mostró ese día convencido de que Cataluña será independiente algún día "porque dos millones de catalanes lo quieren".
"Yo creo que tanto Sánchez como Iglesias eran sinceros cuando decían eso", ha afirmado Puigdemont durante la presentación de su libro. "Otra cosa es que luego sean o no fieles a esas opiniones. Pero creo que eran sinceros. Yo sé distinguir una declaración de cara a la galería de una opinión sincera en el contexto de una conversación de horas".
Puigdemont ha afirmado también que su libro "no es oportunista, tiene la vocación de resistir el paso del tiempo. No es una reivindicación, ni una crítica, ni una idealización. Son unas explicaciones necesarias".
En cuanto a su relación con Oriol Junqueras, Puigdemont ha negado cualquier tipo de tirantez y ha afirmado que ha retomado el contacto con el líder de ERC. "Lo hago por pantalla interpuesta y no con la frecuencia que desearíamos. Todos queremos la independencia de Cataluña, y todos queremos la vía más transitable y eficaz. Pero no hemos planteado ningún escenario de gobernación futura".