Víctor Trimiño (Burgos, 1992) empezó a estudiar Física en el Campus de Leioa (Vizcaya) cuando Patxi López aún ocupaba la Lehendakaritza. Fue entonces cuando, absorto por la forma de hacer política del dirigente vasco, decidió afiliarse al Partido Socialista de Euskadi.
Ahora Trimiño vive en Bilbao y trabaja en una empresa internacional de servicios profesionales de consultoría, ingeniería y arquitectura. Una actividad que, de ahora en adelante, debe compaginar con su nuevo cargo de secretario general de Juventudes Socialistas vascas.
Su debut como dirigente, producido en el X Congreso de las JSE, fue toda una declaración de intenciones. Trimiño no tratará a Bildu como a una formación política más, pese al acercamiento de facto que Ferraz lleva practicando con los abertzales desde hace años -intensificado desde que ambas formaciones estamparan sus firmas en el pacto para derogar "íntegramente" la reforma laboral-.
"Debemos estar enfrente de cualquier intento por normalizar o por blanquear a una fuerza política que sigue siendo incapaz de condenar más de 850 asesinatos y que sigue ensalzando a los terroristas que los cometieron. Ninguna necesidad aritmética justifica tratar como un partido más a quien desde un punto de vista ético no lo son", dijo Trimiño días después de que el Gobierno de España se sentara a negociar los Presupuestos con quienes utilizan ambages para no condenar la violencia de ETA.
El nuevo dirigente de las Juventudes Socialistas en el País Vasco hablaba con conocimiento de causa. No en vano, es miembro del PSE en Galdácano, un pequeño municipio de Vizcaya en el que Bildu ostenta la alcaldía. Esto le confiere la autoridad para reprender a Sánchez por su connivencia con la formación abertzale.
Su referente, Patxi López
El perfil político de Víctor Trimiño puede explicarse a través de su admiración por Patxi López, el político vasco que fue derrotado por Pedro Sánchez en las primarias de 2017. El exlehendakari fue quien le inspiró para dar el salto a la política, pese a su formación como físico.
Esta proximidad hacia López no extraña a sus adversarios políticos. En este sentido, fuentes de NNGG del Partido Popular en el País Vasco cuentan a este medio que "es común ver en las Juventudes Socialistas a simpatizantes de Patxi López, que suelen tener una postura más bien crítica hacia Pedro Sánchez".
Ahondando en el perfil político de Trimiño, estas mismas fuentes destacan su gallardía: "Es valiente, ha querido tirar de las orejas a su partido y marcar un poco la línea a seguir en Euskadi".
Así las cosas, desde NNGG del País Vasco resaltan que las Juventudes Socialistas de Euskadi tienen un perfil "muy españolista, en contra de lo que vienen demostrando los dirigentes del PSE en los últimos años", y ponen como ejemplo de ésto que suelen mostrar una postura "más a la derecha que el PP en cuanto a la defensa del no acercamiento de los presos etarras".
"Tiene un gran futuro por delante, es un socialista constitucionalista, y de esos quedan pocos dispuestos a alzar la voz", sentencian estas mismas fuentes.
Beligerante con Bildu
Si algo quedó claro del primer discurso de Trimiño como Secretario General de las Juventudes Socialistas del País Vasco es que no hará concesiones a Bildu. Y es que, cualquiera que haya seguido la corta carrera política del joven socialista sabrá que esa es una de las pocas líneas rojas que no está dispuesto a traspasar.
"Con Bildu tenemos posiciones totalmente enfrentadas en modelo de país, de gestión y, sobre todo, en cuestiones de ética y de Derechos Humanos. Estas últimas, especialmente difíciles de salvar", sostuvo el pasado mes de agosto en una entrevista concedida a El Generacional. En este sentido, recalcaba que a la formación abertzale le queda "un largo camino por hacer" en el terreno ético.
Un camino que, en opinión de Trimiño, "les queda por andar" después de mostrar este verano -en relación a la falta de una condena a los ataques al domicilio de la dirigente socialista Idoia Mendia- "su escaso interés por deshacer la cultura del odio a la que ellos contribuyeron, así como por deslegitimar el uso de la violencia".
En la entrevista antes mencionada, el joven socialista subrayó la importancia de no "olvidar que muchos dirigentes de ahora, tanto de Bildu como de Sortu, fueron protagonistas de las estrategias y decisiones más siniestras de la izquierda abertzale".
Unas estrategias de las que, como no olvida Trimiño, muchas víctimas fueron socialistas.