En su última aparición, José María Aznar respaldó a Pablo Casado en lo ideológico, pero cuestionó su liderazgo con este dardo: "Ganarse los galones es responsabilidad de cada uno".
Igual que el actual líder del PP, el expresidente del Gobierno se posicionó contra la moción de censura de Vox, pero aprovechó la comparecencia para colocar su "legado" en el espejo del presente: "Dejé unido todo lo que estaba a la derecha de la izquierda. Hoy, ese espacio se encuentra fragmentado y en confrontación".
Distintas fuentes de Génova consultadas por este periódico reseñan que no les sorprende la estocada de Aznar y que va en línea con algunos mensajes aireados en otras ocasiones. Sin embargo, rebaten: "¿Qué había hecho él cuando llevaba dos años al frente del partido?".
Aznar fue elegido candidato a Moncloa en 1989 y heredó de Manuel Fraga el liderazgo del PP en 1990. Dos años más tarde, su balance podía glosarse en una derrota frente a Felipe González -sus expectativas no eran buenas y se daba por hecha- y en un "giro al centro" que no terminaba de prosperar. En 1993, pese a la corrupción que inundaba al PSOE, volvió a perder. Fue presidente seis años después de su nombramiento.
Para muestra, un botón: en el Congreso del PP en Sevilla, se encendían los focos para determinar los momentos del discurso de Aznar en los que la militancia debía aplaudir. Eligieron los referidos al viaje al centro, pero los afiliados mostraban reticencias. La anécdota ilustra las dificultades internas que también encontró Aznar a su llegada al PP.
"Un partido deshecho"
"¡Nosotros encontramos un partido deshecho!", rebate un actual miembro de la Ejecutiva nacional de Génova. "Hicimos lo que pudimos y, teniendo en cuenta las circunstancias, el resultado no fue del todo malo", arguye.
"Claro que el centro derecha se encuentra dividido, es un hecho, pero cuando él estaba al frente no existían ni Ciudadanos ni Vox. Nosotros nos topamos con ese espectro electoral ya troceado", aseveran fuentes populares en clara referencia a la labor de otro expresidente, Mariano Rajoy.
"Estamos en la era Casado. Por supuesto que respetamos lo que dicen nuestros exlíderes. No hacemos como en el PSOE, que se levantan cuando habla González. Pero eso no significa que paremos las rotativas cuando dice algo Aznar", sintetizan.
Pero, ¿a qué cree que se refiere Génova cuando Aznar habla de "galones"? La opinión más extendida, claro está, es la que sigue: "Creemos que insinúa así que Casado no tiene en su haber ninguna victoria electoral".
"Muchas veces no se dan cuenta -insisten en Génova en clara alusión a Aznar y otros exmandatarios conservadores- de que, en dos años, hemos participado en ocho elecciones con sus ocho campañas. ¡Y un Congreso del partido! Por favor, pongamos las cosas en perspectiva".
"Cerramos filas con Pablo. Es el primero elegido por unas primarias prácticamente puras. Hemos recuperado gobiernos en varios sitios. Y él llegará a Moncloa. Aspiramos a hacerlo", concluyen desde el aparato.