Esta ha sido la ristra de calificativos endosada al Gobierno por Santiago Abascal desde la tribuna del Congreso: "Criminal", "socialcomunista", "frente popular", "bolivarianos", "aliados de terroristas", "negligentes", "narcisistas", "promotores de violencia"...
La quinta moción de censura de la Democracia ha arrancado con tres horas de discurso de Vox. Primero ha hablado Ignacio Garriga -candidato a las catalanas y telonero hoy de su presidente- y después Abascal.
El líder de la derecha radical ha iniciado su discurso con esta declaración de intenciones: "Señor Sánchez, su gobierno es el peor de los últimos ochenta años". Una vez más, ha situado la coalición PSOE-Podemos como más nociva para España que el franquismo.
En lo que ya es una de las propuestas más habituales de Vox, Abascal ha apostado por "ilegalizar a los partidos separatistas". Con la vista puesta en las bancadas del nacionalismo, ha apostillado: "Ustedes no son diputados españoles".
"Son públicas sus fechorías", ha relatado Abascal ya en interpelación a Sánchez e Iglesias. "Su Gobierno es el que peor ha gestionado la pandemia en todo el mundo (...) Atacan al jefe del Estado, a la justicia y a la oposición democrática. Son un frente socialcomunista en alianza con separatistas y terroristas", ha añadido a continuación.
Con la premisa de que "a los españoles se les ha acabado la paciencia", el candidato de la derecha radical ha dicho presentarse como alternativa para convocar "nuevas elecciones": "Toda esta manifestación de ministros sabe que yo sí cumpliré mi palabra".
Así se ha referido al compromiso insinuado por Pedro Sánchez mientras impulsó la moción de censura a Mariano Rajoy: un extremo que luego no se produjo con inmediatez.
Este es el retrato que Abascal ha trazado del presidente del Gobierno: "Nunca había habido en Moncloa alguien tan ansioso de poder. Usted utiliza las malas artes, es capaz de cualquier cosa para mantener su cargo".
En clave pandémica, Abascal ha hablado de una gestión "negligente y criminal": "Ni siquiera sabemos cuántos españoles han caído". "Ustedes significan menos libertad y más pobreza, menos orden y más golpismo. Menos respeto internacional para nuestra nación. Ni siquiera Vox fue capaz de prever que irían más allá", ha argumentado.
El candidato de Vox ha culpado a Sánchez e Iglesias de dejar morir a los mayores "sin la extremaunción de un sacerdote, sin la mano de un buen hijo que les cerrara los ojos". "La Historia les juzgará por su especial crueldad y el abandono de los moribundos", ha aseverado.
Sin remilgos, Abascal ha acusado a China de "producir el virus artificialmente" o de "haber dejado que se propagara". No ha sido el único rejonazo de tinte internacional. También ha cargado contra Bruselas por "promover la ruina y la división de los pueblos".
Vox diagnostica que el Gobierno y sus "aliados" han aprovechado la crisis del coronavirus para colmar sus "planes abyectos": "La continuidad del proceso golpista en Cataluña (...), la promoción de la violencia contra Vox mediante alertas antifascistas, la conjura contra la Constitución (...) y las aspiraciones soviéticas que requieren sumas astronómicas de dinero".
Garriga: "Deber nacional"
Ignacio Garriga, candidato de Vox para las elecciones catalanas del próximo febrero, ha sido el encargado de presentar a Santiago Abascal en el Congreso. Este ha sido su arranque: "No es una operación de marketing, sino un deber nacional".
No ha tardado en lanzar un dardo a la bancada del Partido Popular, cuyos diputados todavía desconocen el sentido de su voto. "Puede que perdamos, pero más perderán quienes tengan que explicar a los españoles la continuidad de este Gobierno".
Igual que luego Abascal, Garriga ha tachado al Ejecutivo como el que ha traído "la ruina, la muerte y el derroche". "Ninguna moción ha tenido tantos motivos como la presente", ha dicho el también diputado por Cataluña.
Uno de los puntos que más murmullo ha generado ha sido su ataque a Pablo Iglesias e Irene Montero: "Hay un matrimonio en el Gobierno, igual que en Nicaragua, donde presidente y vicepresidente son marido y mujer. ¡Ustedes venían a representar al pueblo!".
También se ha mofado de las aficiones de Iglesias: "No pierda el tiempo viendo más series. Ustedes han convertido este país en una serie y cada temporada es peor que la anterior. Más muertos, más miseria, más intrigas palaciegas y agentes encubiertos al servicio de terceros países".
Garriga ha enviado a Iglesias a "dar lecciones de democracia a sus amigos etarras". Luego ha recriminado a Sánchez haber lamentado la muerte de un terrorista: "Se quitó la vida, esa fue una elección que nunca tuvieron en su mano las víctimas de su actuación criminal".
Así ha concluido Garriga su discurso: "Señorías, que Dios les bendiga y que Dios bendiga nuestra patria, ¡España!".