Inés Arrimadas sostiene que la moción de censura de Vox es "un regalo" para Pedro Sánchez y los nacionalistas. Ciudadanos votará "no". "No queremos a Abascal de presidente del Gobierno ni a Vox como proyecto de país". Así lo ha sintetizado la política jerezana desde la tribuna.
"Viendo el debate de hoy, no parece que ayer murieran 218 personas. Es como si un avión lleno de pasajeros estallara cada día. Hemos normalizado el dolor y la tragedia", ha arrancado Arrimadas. Una introducción para asomar la doble estocada que iba a brindar a Sánchez y a Abascal.
"Asistimos a un debate tóxico. Tenemos que escuchar lecciones de democracia de Bildu y discursos trasnochados sobre virus chinos", ha aseverado la presidenta de Ciudadanos. Ya con la vista puesta en Abascal, ha hablado de "conspiraciones masónicas". En definitiva, "esto es una burbuja que no se parece en nada al miedo de las familias".
Arrimadas sostiene la siguiente teoría: la moción "ensancha la trinchera" y "da armas" a Sánchez e Iglesias para "promover la confrontación". De ahí que haya concluido: "Esto parece un plan de Iván Redondo".
En Ciudadanos diagnostican que Vox ha logrado "reunir el cabreo y la indignación" contra el Gobierno, pero que, "bajo ese barniz", no hay un proyecto que "seduzca a la gente", "ni siquiera a los votantes" de Abascal. "Necesitan partir en dos este hemiciclo y ustedes les ayudan", ha criticado.
Arrimadas ha tratado de desmontar el argumento con el que suelen lancearle desde Vox: "Ciudadanos sostiene y fortalece al Gobierno con sus negociaciones". Esta ha sido su respuesta: "¡Tienen mayoría! La pregunta es qué van a hacer en estos tres años. Nosotros intentamos que no influyan los separatistas".
"Por supuesto que estamos cabreados e indignados, pero el cabreo y la indignación no es un proyecto político", ha resumido Arrimadas. En clave irónica, ha incidido: "Si para ustedes nosotros somos unos traidores, no les va a quedar ni Don Pelayo. El patriotismo es hacer lo correcto para tu país aunque te resulte difícil".
En ese instante, ha mencionado a "constitucionalistas" como Pérez-Reverte, José María Aznar, Felipe González, Pedro J. Ramírez o Carlos Iturgaiz, que para Vox "también son unos traidores".
Responde Abascal
Abascal, en su turno de réplica, ha especificado que no considera "traidor" a Ciudadanos. Visiblemente molesto por haber sido acusado de fortalecer a Sánchez, ha rebatido: "Ustedes son su muleta, ¿eso no es fortalecerle?".
"Sánchez se ha tenido que retratar hoy. Ha firmado un manifiesto con Bildu, que no ha condenado ninguno de los crímenes que he mencionado en esta tribuna". Ese gesto, la referencia a las víctimas de ETA, sí ha sido aplaudido por Arrimadas.
Abascal ha tachado a Ciudadanos de "equidistante": "Apoyan a un Gobierno que ha provocado el mayor número de muertos del planeta". Al hilo del ya mítico 'veleta naranja', el candidato de Vox ha atacado: "Generan confusión ideológica con sus variaciones. Los españoles necesitan certezas y saber adónde van sus votos".