Los negociadores de Ciudadanos pueden ir en el Metro sin que la multitud repare en su papel político. El votante medio no es capaz de asociar los nombres de Carlos Cuadrado y José María Espejo a una fotografía. Vicesecretarios de Inés Arrimadas, son los hombres con más poder en la formación liberal. Apenas hay decisiones estratégicas que se cocinen sin su supervisión.
Siguiendo la terminología de Juego de Tronos, se les podría definir como "manos de la reina". Si nos quedamos con la de Aldous Huxley en relación al cardenal Richelieu, serían "eminencias grises". Dicho de otra manera: Arrimadas ha delegado en ellos una amplísima cuota de poder. Tanta que se han ganado, entre algunos de sus compañeros, el apodo de "sargentos".
Paradójicamente, ambos son camisas viejas de Ciudadanos. Se integraron en el partido al poco de su fundación y Albert Rivera los convirtió en pilares fundamentales de su proyecto. Jamás levantaron la voz contra el veto al PSOE, pero hoy son los dos muñidores de los pactos presupuestarios con Pedro Sánchez.
Tanto sus partidarios como sus detractores -así lo ha contrastado este periódico a través de varios dirigentes de la formación- coinciden en otorgarles un mando casi "absoluto". Espejo rige el grupo parlamentario en el Congreso -también es diputado- y Cuadrado controla la fontanería de la organización.
Ambos forman parte del grupo clave de Ciudadanos, llamado Comité Permanente. Además de Arrimadas, lo completan Melisa Rodríguez -portavoz de la Ejecutiva-, Marina Bravo -secretaria general- y Edmundo Bal. Pero las fuentes consultadas reiteran que los asuntos trascendentes se gestan entre Arrimadas y sus dos vicesecretarios.
Esta situación ha soliviantado a varios mandatarios reconocidos de Ciudadanos, que lamentan no haber podido aportar su opinión -con carácter previo- sobre la prórroga de la alarma durante seis meses o la negociación presupuestaria.
"Es que lo deciden todo ellos. ¡El debate no existe! Cualquier decisión pasa por sus manos. En la última etapa de Rivera se criticaba la falta de democracia interna, pero ahora es mucho peor", desgranan algunas de las fuentes consultadas.
Partido saneado
En cambio, otros dirigentes cercanos al aparato rebaten: "Es normal que exista esa crítica. Siempre hay gente que no manda y que quiere hacerlo. Ocurre en todos los partidos políticos".
La cuestión es: ¿por qué Arrimadas ha delegado en ellos tanto poder? Los críticos responden de esta manera: "Es incomprensible. Ninguno de ellos tiene experiencia política de gobierno. Tampoco son grandes pensadores. Carecen de instinto estratégico. Hemos llegado tardísimo a la batalla por el español como lengua vehicular".
Sus fieles, en cambio, arguyen acerca de Cuadrado: "Lo ha hecho impecable como responsable de finanzas. Tras la debacle en las últimas generales, consiguió mantener a flote todo esto. Ni siquiera tuvimos que cambiar de sede. El partido está muy saneado".
Acerca de Espejo destacan su "experiencia como vicepresidente del Parlament de Cataluña en los momentos difíciles" y su "rigor en el estudio de las propuestas en las distintas Cámaras".
Apunte biográfico
Carlos Cuadrado (Barcelona, 1968) forma parte de Ciudadanos desde su fundación. Cursó estudios de ingeniería industrial y es dueño de una empresa textil. También lanzó negocios en el ámbito del ensamblaje de maquinaria láser.
Su puesto de mayor relevancia interna llegó con Albert Rivera, que le nombró "responsable de finanzas". En Ciudadanos prefieren no emplear el término "tesorero" por su inevitable vinculación a Luis Bárcenas y las cloacas del PP.
Es soltero y padre de dos hijos. Periquito, socio del Real Club Deportivo Espanyol. En 2019, encabezó la lista de Madrid al Senado, pero pocos meses después renunció a su escaño para dedicarse a su especialidad: la gestión interna.
José María Espejo-Saavedra (Madrid, 1976) era secretario de Acción Institucional en la etapa anterior. Se encargaba de armonizar el ideario de Ciudadanos entre las distintas delegaciones territoriales, lo que le concedió un amplio poder. ¿Qué significa esto? Por ejemplo, cuando el grupo parlamentario de Cs en una Comunidad Autónoma debía postularse acerca de un tema candente, debía consultar a Espejo antes de la votación.
Madrileño del barrio de El Retiro, viajó a Barcelona hace ya casi dos décadas. Se incorporó, al poco de licenciarse, al gabinete jurídico de La Caixa, donde conoció a Albert Rivera. Íntimos amigos, fueron dos de los principales impulsores de aquel Ciudadanos que comenzaba a germinar.
De apariencia tranquila y sosegada, le encanta la velocidad, las motos, la música electrónica y el submarinismo. Una vez, nadó entre tiburones. En 2012 fue elegido diputado del Parlament, donde permaneció hasta 2019, cuando fue llamado a Madrid por el expresidente de la formación liberal.