El pasado 15 de abril la Policía detuvo a cinco radicales por los disturbios que tuvieron lugar en Vallecas durante el acto que celebró Vox en la denominada Plaza Roja. Aquel mitin se celebró la tarde del 7 de abril. La Policía detuvo a los radicales ocho días después. Sin embargo, las identidades de los radicales arrestados en aquellas protestas no se revelaron hasta 15 días más tarde. Fue este sábado 1 de mayo cuando se supo que entre los detenidos había al menos dos personas vinculadas al entorno de Podemos.
Ahora que se ha desvelado la identidad de dos de aquellos radicales y su vinculación con Podemos eso ha alineado a la derecha contra el Gobierno de Pedro Sánchez. El Partido Popular, Ciudadanos y Vox han acusado al Ejecutivo de ocultar deliberadamente esta información y a Pablo Iglesias en concreto de enviar "matones a sueldo" contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
La noticia ha hecho subir los voltios de la bronca política a las puertas del final de la campaña electoral madrileña y ha demostrado una vez más que la contienda que se celebrará el próximo 4 de mayo tiene también carácter nacional.
Los partidos del centro derecha señalaron unánimemente en las últimas horas al Gobierno por ocultar durante 15 días que dos de los arrestados por enfrentarse a la Policía Nacional durante un acto de Vox en la Plaza Roja de Vallecas están vinculados con el partido liderado por Pablo Iglesias, que reconoció en parte estos términos.
"Hace más de una semana cuando [Santiago] Abascal rompió un cordón policial y provocó una carga, un miembro de mi partido de Vallecas fue detenido y, por supuesto, no cometió ningún ilícito administrativo ni penal y esto quedará en nada", dijo el candidato a la Presidencia de la Comunidad madrileña.
Iglesias relacionó la noticia con "la preocupación" de algunos al filo del fin de campaña e incluso ironizó con que "no es descartable" que puedan aparecer otras noticias similares que lo relacionen "con el asesinato de John Fitzgerald Kennedy".
La lectura de la derecha es radicalmente diferente. PP, Ciudadanos y Vox coinciden en que tanto Sánchez como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ocultaron deliberadamente esta información. De hecho, han transcurrido 15 días desde que fueron detenidos hasta que se han dado a conocer sus identidades.
Fuentes de Interior niegan a EL ESPAÑOL que la Secretaría de Estado de Seguridad tuviera conocimiento de ello y, por ende, rechazan que hubiera la mínima intención de ocultarlo.
A su vez, en la jornada de este sábado, fuentes de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Madrid confirmaron a este medio la vinculación entre los detenidos y el partido de Iglesias.
Santiago Abascal se pronunció este sábado en estos términos y recriminó a los dirigentes del Gobierno que mientras tanto "organizaban un montaje balístico", en alusión a las misivas con balas recibidas por, entre otros, el propio Marlaska o Pablo Iglesias. Unas misivas que desde el principio han sido cuestionadas por los dirigentes del partido de ultraderecha.
Este domingo, la candidata del partido a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha afirmado en esRadio que el Ejecutivo central "miente" y ha señalado directamente a Iglesias por haberles acusado de ir a provocar a Puente de Vallecas cuando fue él quien envió a "sicarios a apedrearles".
De esta forma, ha considerado las próximas elecciones una "oportunidad" para "decir ya está bien", para sacar al país de la situación creada por "Gobierno criminal", según sus propias palabras.
Abascal aseguró este sábado que el partido va a exigir que se aclare "hasta qué punto" Iglesias está "directamente implicado" en la violencia y que "ampliará" la denuncia por lo ocurrido en Vallecas.
Casado se pronunció también este sábado en la misma línea y exigió además a Pedro Sánchez una "condena rotunda" de las presuntas agresiones. "No sólo le pagamos la niñera, sino escoltas que patean policías", censuró en alusión a Pablo Iglesias durante un acto junto a la candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, que también criticó al líder de Podemos por contratar "matones a sueldo" y acusó al Ministerio del Interior de "ocultarlo". "[El 4 de mayo] vamos a celebrar cómo Pedro Sánchez se esconde, cómo Pablo Iglesias se va y cómo las mentiras se caen", aseveró la popular.
Desde Ciudadanos, aunque con un tono más moderado, no han dejado de denunciar los hechos y señalar al Gobierno. El candidato a la Comunidad de Madrid, Edmundo Bal, se limitó a expresar su condena y fue la presidenta de la formación, Inés Arrimadas, quien apuntó directamente a Grande-Marlaska, quien, dijo, "vuelve a retratarse al ocultar esta vergüenza".
Ni el candidato del PSOE, Ángel Gabilondo, ni la de Más Madrid, Mónica García, han hecho alusiones a estas detenciones.