Isabel Díaz Ayuso ha tomado posesión este sábado como presidenta de la Comunidad de Madrid. La dirigente popular, que ahora liderará un Ejecutivo en solitario, ha prometido su cargo en la Real Casa de Correos (Puerta del Sol). Un escenario que ha aprovechado para reconciliarse con Felipe VI: "Madrid, España y Monarquía son inseparables".
La dirigente autonómica ha agradecido al monarca su "cercanía con Madrid" y el haber estado "siempre, sobre todo en los momentos más duros, junto a los madrileños y junto al resto de los españoles, junto a las empresas e instituciones, dentro y fuera del país, con su habitual cercanía" como también lo han estado "la Reina, la infanta Sofía y la Princesa de Asturias, doña Leonor".
Ayuso ha procurado así amainar la polémica suscitada por sus palabras vinculando al Rey con los indultos a los sediciosos del procés. Unas palabras que tuvieron que ser corregidas por el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, que dijo que "Felipe VI es impecable" y "Sánchez es responsable de los indultos".
Isabel Díaz Ayuso toma posesión como presidenta de la Comunidad de Madrid
"Enamorada de Madrid"
El líder del PP, junto a los barones autónomicos, no ha querido perderse el discurso de Ayuso, que ha destacado la "fortaleza" de Madrid y ha reivindicado que nada nunca ha sido "ajeno" a la región y en ella no han escondido "nunca la cabeza", ni han mirado "para otro lado". "Aquí se viene a vivir en paz, sí, pero también a estar donde pasa lo importante", ha remarcado.
La alocución de la presidenta ha sido toda una reivindicación castiza. Y es que Madrid, ha resaltado, es una comunidad "que sorprende y maravilla al mundo", que "ha visto de todo y acoge de todo" y que es objeto de "canciones, cuadros, libros y películas". "Estoy enamorada de Madrid", ha admitido.
La presidenta reelecta ha aseverado que su Gobierno "aspira a que todos se sientan representados" porque sabe que sus votantes del pasado 4 de mayo proceden "de izquierda y derecha". De ahí su compromiso de "no defraudar" y dejar una Comunidad de Madrid "mejor que la que nos encontramos cuando llegué", allá por mayo de 2019.
Ayuso ha presumido de programa de Gobierno -47 medidas para "atender a los principales retos"- y de cheque bebé: "El apoyo a la maternidad y las familias será una de las razones de mi mandato".
Ningún miembro del Gobierno de Pedro Sánchez ha estado presente en el discurso de la baronesa popular, que se ha convertido en némesis del sanchismo por méritos propios.
La Secretaría de Estado de Comunicación ha informado posteriormente que esta ausencia se ha debido a que el Gobierno "no ha recibido ninguna invitación para participar en este importante acto institucional". Y recuerda que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha estado representado por la delegada del Gobierno, Mercedes González.
Además, en el comunicado Moncloa "felicita a la presidenta madrileña por el inicio de su nuevo mandato", al tiempo que "expresa su deseo de cooperar en todo lo necesario para conseguir el mayor desarrollo y bienestar de la Comunidad de Madrid y de sus ciudadanas y ciudadanos".
Legislatura XII
La Asamblea de Madrid otorgó su confianza a Ayuso en la primera votación con los 77 votos favorables de PP y Vox, que ya había anunciado que la apoyaría "a cambio de nada". Justo al término de ésta, se conoció la composición del nuevo Gobierno regional, que mantiene el núcleo duro de la anterior legislatura, pero ficha a la ex de Ciudadanos Marta Rivera como consejera de Cultura, Turismo y Deportes.
El nuevo Ejecutivo disminuirá su tamaño de 13 a 9 consejerías y no contará con vicepresidencias. Una reducción que la presidenta considera necesaria como consecuencia de la crisis económica derivada de la pandemia: "Si todos nos tenemos que apretar el cinturón, empecemos por los gobernantes".
La XII será una legislatura corta y previsiblemente cómoda, pues durará sólo dos años (en 2023 habrá nuevas elecciones) y, hasta entonces, el Partido Popular gozará de una holgada mayoría para sacar adelante todas sus propuestas: sus 65 diputados suman ocho más que las tres izquierdas juntas, 57.
Esto significa que salvo que los 13 diputados de Vox votasen junto a la izquierda, cosa que se antoja improbable, Ayuso no encontrará trabas para aprobar sus medidas.