La marcha nazi que desfiló por el barrio madrileño de Chueca sigue dando de qué hablar casi dos semanas después. Este martes, concretamente, ha llegado al pleno municipal de Madrid gracias a la vicealcaldesa, Begoña Villacís, que ha propuesto a todos los grupos políticos que "se coloque la enseña LGTB de forma permanente en la plaza de Pedro Zerolo".
La iniciativa de Ciudadanos ha incorporado una enmienda de modificación del PSOE redoblando la apuesta: la colocación de un monumento en favor de las "víctimas LGTB" perseguidas "por su orientación sexual y de identidad de género".
Y la enmienda ha contado con el apoyo de todos los grupos parlamentarios menos de Vox, que se ha abstenido. No obstante, el Partido Popular ha votado a favor sin querer. "¿La votación de la enmienda transaccional suponía la votación del texto final?", ha preguntado con incredulidad el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, evidenciando el equívoco de su grupo, que había dejado entrever minutos antes su abstención.
Los concejales populares se pensaban que estaban votando a favor de que los socialistas pudieran incorporar la citada enmienda a la redacción original, y no la iniciativa en su conjunto, lo que ha dado como resultado una situación de lo más inverosímil.
La iniciativa
Villacís ha pedido a las distintas formaciones que "ondee la libertad" en respuesta a la concentración ultra que desfiló por el mítico barrio gay, donde un grupo de radicales desfilaron al grito de "fuera maricas" o "fuera sidosos de nuestros barrios" por la inacción de la delegada del Gobierno, Mercedes González, que pidió perdón a posteriori.
La lideresa de Cs también ha pedido al Ayuntamiento de Madrid secundar la resolución aprobada por el Parlamento Europeo el pasado 14 de septiembre, que exigía a los estados miembros "reconocer decisiones relativas al derecho de familia de otros países, que pueden incluir cuestiones como los vientres de alquiler".
Pero el PP, que se abstuvo entonces en la Eurocámara, lo ha vuelto a hacer en esta ocasión por "honestidad política". "Tratemos a los madrileños como mayores de edad. Ustedes saben que este pleno no tiene competencias para decirle a un Estado lo que tiene que hacer. Hay que decir a los ciudadanos la verdad", ha explicado la popular Sonia Cea Quintana.
Por su parte, la formación más a la derecha del pleno ha replicado con una propuesta propia. Javier Ortega Smith ha pedido al Ayuntamiento que inste a la Delegación del Gobierno a "aprobar un plan concreto realmente efectivo para prevenir la violencia en las calles con la colaboración de la Policía Municipal" y así "ejerza sus competencias para prohibir aquellas manifestaciones en las que se consideren fundadas las posibles altercaciones del orden público por parte de grupos que provoquen violencia y altercados en las calles". Ésta ha sido aprobada.
Más propuestas
Pero la de Ciudadanos no ha sido la única propuesta al respecto. Ni mucho menos. El PSOE, a través de Ramón Silva y Emilia Martínez Garrido, ha pedido al consistorio que "elabore un Plan de Acción de Conductas de Odio y Discriminación" y "condene los hechos acaecidos el sábado 18 de septiembre en Chueca".
Y la condena ha sido unánime, pero Partido Popular y Vox han apoyado sólo algunos de los puntos, rechazando aquellos que tienen "un claro sesgo ideológico", en palabras de Ortega Smith. Sus impulsores, Ciudadanos, el Grupo Mixto y Más Madrid han votado a favor de la iniciativa en su conjunto.
Precisamente este último grupo ha preguntado al alcalde si "cree que hay una relación entre los discursos de odio y la homofobia", estableciendo una correlación entre Vox y "las consignas escuchadas en la manifestación de extrema derecha".
¿La respuesta de Almeida? "La banalización del odio que la izquierda ha practicado durante los últimos años contribuye enormemente en todo lo que está sucediendo. Ya está bien que, por no actuar como ustedes, tengamos que aguantar que nos llamen fascistas, machistas, homófobos o racistas. El odio son ustedes porque lo banalizan y lo utilizan".
Invitados por la formación que lidera Maestre en la capital, por cierto, han acudido al pleno los representantes de colectivos LGTB que interpusieron la semana pasada una querella criminal contra los organizadores e integrantes de la manifestación homófoba de Chueca.