Santiago Abascal ha elegido la "inmigración ilegal" como asunto de debate en su intercambio de este miércoles con Pedro Sánchez. "No puede haber barrios seguros si no hay fronteras seguras", ha dicho el candidato de Vox. A continuación, ha puesto sobre la mesa agresiones y delitos recientes "consecuencia de la inmigración ilegal".
Se ha referido, por ejemplo, a la célula yihadista desarticulada la semana pasada en Madrid y Barcelona. "Algunos de los detenidos habían entrado en España ilegalmente, en patera". También a un "policía nacional pateado y enviado a un hospital en Zaragoza". Según Abascal, este agente "no se atrevió a defenderse" para evitar una hipotética "persecución mediática" posterior.
Luego ha mencionado "un atentado yihadista en Murcia cometido por un exmena". En ese instante, ha descrito "grupos de menas organizados acudiendo a zonas de ocio donde están sus hijos –se lo decía a Sánchez–": "Cometen atracos, dan cuchilladas y agreden sexualmente".
A ojos de Abascal, el Gobierno evita "poner ahí el foco mediático" para que los detenidos por ese tipo de acciones sean "puestos en la calle" rápidamente. Incluso ha acusado al Gobierno de "premiar a los que agreden a policías".
"Es usted el flautista de Hamelín que convoca a la inmigración ilegal. Y eso genera delincuencia e inseguridad. Con sus políticas, llegarán más inmigrantes ilegales", ha concluido el líder de Vox.
Pedro Sánchez, en su turno de réplica, ha dicho que el "patriotismo de Vox" consiste en "crispar y dividir": "Ojalá fuese usted la mitad de patriota de lo que reclama al resto de los españoles".
"Este gobierno apuesta por la seguridad. La seguridad pública. El delegado del Gobierno que decía que la seguridad es para quien se la pague pertenece a la bancada de la derecha", ha contestado el presidente del Gobierno.
Sánchez, con "datos oficiales", ha rebatido: "La tasa de criminalidad de este primer trimestre es la más baja de la serie histórica". También ha aseverado que en los tres primeros meses de 2021 "los hurtos se han reducido un 38%"; y el robo de vehículos, "un 30%". "Todo eso tiene que ver con el trabajo del Gobierno en estos tres años", ha apostillado.
"¿Existe el riesgo cero? No. ¿Nos preocupamos? Por supuesto que sí", ha resumido el también secretario general del PSOE. Sánchez ha celebrado que el "gobierno socialdemócrata ha incrementado el salario medio de las fuerzas de seguridad del Estado". También ha exhibido como mérito propio haber "incrementado la dignidad laboral" de los distintos cuerpos.
Tras la retahíla de datos ofrecidos, Sánchez se ha quedado sin tiempo y ha dejado la última palabra del debate a Abascal. Los veinte segundos que le quedaban al presidente de Vox se han traducido así: "No le pido que se ponga en la piel de los españoles. Le pido que se ponga en la piel de los que reciben a sus hijos en casa con una cuchillada o a sus hijas violadas. ¡Que usted hable como padre!".
Estas últimas palabras de Abascal han arrancado una ovación de los suyos y un murmullo de desdén en la bancada de la izquierda. Aunque tanto una circunstancia como la otra eran previsibles.