El Gobierno de PSOE y Unidas Podemos está, ahora mismo, solo en la defensa de la reforma laboral que aprobará este martes en Consejo de Ministros. No tiene apoyos para aprobarla y tendrá que negociar para cambiar un texto que "ha costado muchísimo y llegó in extremis", según fuentes socialistas.
Los votos negativos asegurados del Partido Popular (89) y Vox (52) ya suman más con las posiciones tomadas por algunos de los "socios de legislatura" de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz. ERC, PNV y EH Bildu ya han dicho "no". Al menos, de momento, y si no se atienden algunas de sus exigencias... pero éstas, de aceptarse vía enmienda, puede ser que den al traste con el consenso social.
Los 24 votos parlamentarios que suponen estos tres grupos nacionalistas e independentistas pueden resultar clave para hacer caer un texto que, en todo caso, entrará en vigor antes de fin de año. Saldrá como real decreto ley de la reunión del Ejecutivo el Día de los Inocentes. Pero si a los 141 escaños de PP y Vox se les suman los de ERC, Bildu y PNV en el "no", la relación de fuerzas quedaría desequilibrada en contra de Sánchez y Díaz.
Y, por ejemplo, Ciudadanos pasaría a tener la llave.
Ciudadanos y el PSOE
El portavoz de los liberales, Edmundo Bal, admite que su formación aún no tiene una posición fijada, dejándose querer por parte del Ejecutivo. "Hemos analizado la reforma y, desde luego, hay varias cosas que no nos gustan nada", ha comentado en conversación con este periódico.
El portavoz del PSOE, por su parte, admite que su formación tendrá que negociar. A la espera del calendario de la ministra de Trabajo, Héctor Gómez atendía EL ESPAÑOL este día de Navidad. "Hablaremos con los grupos parlamentarios la semana que viene, y veremos qué piden exactamente", para ver hasta dónde se puede llegar.
Pero los socialistas están tranquilos, porque cuentan con que ERC, Bildu y PNV no tienen demasiada fuerza negociadora, ya que "la alternativa es que se mantuviera la legislación del PP". Y serían ellos los que tendrían que explicar a su electorado que prefieren la reforma de Rajoy.
Entonces, ¿hay alguna opción de que Sánchez mire a la formación de Inés Arrimadas? Esa posibilidad queda muy lejos, teniendo en cuenta que la cabeza visible del acuerdo es Yolanda Díaz, y la militante del PCE preferirá hacer "retoques" de acuerdo con los "socios de legislatura". Esto lo tienen muy claro en Cs. "Podemos ser decisivos, pero estamos convencidos de que ellos se pondrán de acuerdo enseguida. Aunque según sus manifestaciones..."
Nochebuena y Navidad
Y es que en Nochebuena fueron Bildu y ERC. Y en Navidad ha sido el PNV, por boca de Aitor Esteban, el que ha fijado posición. "Hoy estamos en el no, mientras no se atienda la prevalencia de los convenios autonómicos".
El día de Nochebuena, la elección de Bildu fue llamativa. Normalmente, es la portavoz parlamentaria, Mertxe Aizpurua, la que fija posición en los temas "estatales", como esta formación independentista llama a los asuntos que afectan a toda España.
Pero en esta ocasión fue Arnaldo Otegi quien salió en rueda de prensa a poner las cartas sobre la mesa: "Estamos tremendamente decepcionados", apuntó el líder de la formación abertzale a propósito de la reforma laboral pactada por el Gobierno con empresarios y sindicatos. "Si no se recuperan los derechos básicos arrebatados por la anterior reforma, EH Bildu no avalará esta reforma".
Y tampoco lo hará Esquerra Republicana de Catalunya, con quien los bildutarras tienen un acuerdo de estrategia parlamentaria desde el inicio de esta legislatura. Y (salvo contadísimas excepciones) siempre votan lo mismo, ya sea a favor o en contra de las posiciones del Gobierno. Juntos, suman 18 votos en el Congreso, y suponen con ello un peso que decanta victorias o derrotas de la coalición PSOE-Unidas Podemos.
Y más cuando, como ha ocurrido en este día de Navidad, se suma el PNV. Este sábado 25 de diciembre, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, afirmaba que su grupo tampoco respaldará la primera reforma laboral que llega con pacto social al Congreso en más de 40 años si no plasma la "prelación" de los convenios vascos sobre los de ámbito estatal.
...y además, los Presupuestos
Y así, el Ejecutivo de Pedro Sánchez se queda sin mayoría para sacar adelante la convalidación del real decreto que aprobará el próximo martes 28 de diciembre en el último Consejo de Ministros del año. Precisamente, el mismo día en el que ERC, Bildu y PNV tienen que retratarse con los Presupuestos en la Cámara Baja, que regresan enmendados del Senado, ratificando (o no) su apoyo.
Otegi anunció en el día de Nochebuena que Bildu "trabajará conjuntamente" con ERC y, probablemente, también con otros partidos de izquierda para intentar "modificar" el decreto de la reforma laboral. PSOE y Podemos se empeñaron en que la norma llegara pactada entre CEOE, Cepyme, UGT y CCOO precisamente para que esa legitimidad les evitara un trámite engorroso en el Congreso... y quisieron votar las cuentas este jueves para que no se conocieran antes los términos de una reforma laboral sólo "cosmética".
Porque el texto final, calificado como de reforma blanda -por obra y milagro de las presiones de Bruselas-, es muy lejano a la promesa de "derogación" de la norma que sacó adelante el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012, no cumple tampoco con lo firmado por la propia Aizpurua con la entonces portavoz del PSOE, Adriana Lastra, y el de Unidas Podemos, Pablo Echenique, en mayo de 2020.
A cambio, Bildu comprometió su voto para una nueva prórroga del estado de alarma. Y ahora, la formación independentista vasca se siente traicionada, engañada, y dispuesta a ponerlo difícil. Incluso con los Presupuestos.
Lo mismo que los republicanos de Esquerra. El propio Gabriel Rufián ya dejó claro al conocerse los términos del acuerdo que no le gustaban, y que ERC exigirá la prevalencia de los convenios autonómicos, por encima de los de empresa y los sectoriales estatales.
Ambas formaciones alegan que sus territorios son "singulares", y las condiciones de trabajo también. Es más, lo mismo que el PNV, recuerdan que UGT y CCOO no son mayoritarios en País Vasco ni Cataluña, razón por la que no se sienten comprometidos con lo acordado, ya que no se ha tenido en cuenta la sensibilidad de los trabajadores vascos y catalanes...
Otegi advirtió de que Bildu y ERC introducirán enmiendas durante la tramitación en el Congreso, porque la nueva reforma laboral acordada y defendida por la vicepresidenta Yolanda Díaz es fruto de "un mal acuerdo". Lo mismo ha avisado este sábado Esteban: "Hoy por hoy, el PNV está en el 'no' a ese texto", sentenciaba en una comparecencia ante los medios este sábado en Bilbao.