Este martes 28 de diciembre, Pedro Sánchez logrará la aprobación de sus segundos Presupuestos, que también son los segundos de la Covid. Pero aunque Moncloa quiso bautizarlos como "los de la recuperación", ni los datos económicos le dan la razón, ni la pandemia le deja un respiro. El PIB crece menos de la mitad de lo previsto, la inflación triplica lo presupuestado... y la variante ómicron ha dado al traste con todos los mensajes de optimismo en apenas dos semanas desde su estallido.
Por eso, el Hemiciclo que aplauda a la ministra María Jesús Montero este Día de los Inocentes recordará al de los peores momentos del confinamiento por el estado de alarma. Menos de un 10% de los diputados acudirá al palacio de la carrera de San Jerónimo a votar las cuentas públicas, según ha podido confirmar este periódico en fuentes parlamentarias.
Pero no sólo es la Covid... también las reservas vacacionales. Las direcciones de los grupos han dado orden de que sólo acudan al pleno de manera presencial "una representación testimonial" de cada formación. Por la expansión desatada de la pandemia y porque muchos parlamentarios, en estas fechas de fiestas familiares, ya no tenían previsto estar en Madrid después de Nochebuena.
Cuando el martes pasado, los portavoces de PSOE y de Unidas Podemos impulsaban un pleno extraordinario para el jueves, y llamaban con prisas a sus homólogos del resto de grupos parlamentarios tenían varias razones de peso.
El socialista Héctor Gómez y el morado Pablo Echenique querían el apoyo de toda la Cámara para cambiar el orden del día del 23 de diciembre y, así, adelantar la aprobación definitiva de los Presupuestos Generales del Estado de 2022. O incluirlo en la sesión de manera sobrevenida o convocar un pleno extraordinario, reglamentariamente, tras la sesión de ese jueves.
Asegurar el voto
Todo para asegurar las cuentas públicas para el segundo año después de la llegada de la pandemia, el "Presupuesto de la recuperación", la ley que le asegura estabilidad a Pedro Sánchez hasta el final de la legislatura... pero sólo si sale adelante, claro.
Porque en el PSOE vieron las barbas de medio Congreso pelar cuando esa mañana se supo que más de 50 diputados se habían confinado en sus domicilios. Entre infectados y contactos estrechos, ese martes caían representantes de todos los grupos.
La Mesa del Congreso habilitó, ante la emergencia y por unanimidad, el voto telemático para lo que restaba de pleno semanal... y los socialistas quisieron aprovechar la circunstancia para votar cuanto antes los PGE.
Por un lado, porque además del virus -que ha tenido en cama "muy afectados" a diputados del PSOE, de Vox y del PP, según ha podido confirmar este diario- estaban las vacaciones. Con el voto a distancia habilitado por la Mesa, todas sus señorías han sido obligadas por la dirección de sus grupos a dar buena cuenta de dónde se encontrarán durante la jornada del martes. Y, sobre todo, a estar localizables telemáticamente para que no se pierda un solo voto.
Porque, en realidad, nadie se esperaba la vuelta de las cuentas públicas a la Cámara Baja desde el Senado. Pero una enmienda de Compromís, aprobada de manera sorpresiva con los votos favorables del Partido Popular, obligaba a Meritxell Batet a convocar ese pleno de urgencia el Día de los Inocentes.
Y eso trastocaba el calendario vacacional de casi todos los miembros del Congreso, con residencia fuera de Madrid: en caso de no haberse aprobado esa enmienda, las cuentas públicas habrían salido aprobadas definitivamente del Senado, y no se habría convocado el Congreso el día 28.
Mientras los funcionarios se quejan de que los diputados están gozando de un trato de favor, al permitírseles teletrabajar por haber sido contacto estrecho de positivos, mientras a ellos -sanitarios incluidos- se les prohibió, precisamente, el mismo martes en que sus señorías se confinaban... Pedro Sánchez tendrá que superar la imagen de un Congreso semivacío para convencer a la ciudadanía de, pese a que el crecimiento económico no llega y la Covid no se va, los Presupuestos que votará cada diputado desde su casa son "los de la recuperación".