Pablo Casado planea rebajar 5 impuestos para reducir en 10.000 millones la presión fiscal

En un año en el que se reactiva el calendario electoral (con los comicios del 13-F en Castilla y León y los andaluces que deben celebrarse antes de fin de año), el PP quiere hacer patente que tiene un modelo económico alternativo al del Gobierno, que no logra remontar la caída del PIB del 10,8% registrada en 2020, el primer año de la pandemia.

Un destacado miembro del equipo económico del PP explica a EL ESPAÑOL que su propuesta de rebaja fiscal persigue un doble objetivo. En primer lugar, compensar a los españoles la pérdida de poder adquisitivo sufrida durante los dos últimos años (primero con la pandemia y ahora por una inflación interanual que alcanza el 6,5%, y que amenaza con prolongarse durante los próximos meses).

En segundo lugar, el PP pretende ofrecer un entorno fiscal más competitivo, que permita atraer empresas e inversiones. "El PP ya ha demostrado en las comunidades autónomas en las que gobierna que las bajadas de impuestos reactivan la actividad económica, la creación de empleo y el consumo", señala una fuente del Partido Popular, "por tanto, bajando impuestos el Estado logra incrementar su recaudación final".

Los populares recuerdan que, según todos los organismos internacionales, España fue el país de la OCDE en el que más se hundió la economía en el primer año de la pandemia (un 10,8% del PIB) y el que peor se está recuperando ahora (el PIB creció sólo un 4,5% en 2021, la mitad de lo que había anunciado inicialmente la ministra Nadia Calviño). 

Algo que achacan a las decisiones desacertadas del Gobierno, que rema en dirección contraria a la receta que están aplicando casi todos los países de la UE para superar la crisis provocada por el coronavirus.

El presidente nacional del PP, Pablo Casado, ha recordado que están impulsando rebajas fiscales generalizadas países como Alemania (por importe de 30.000 millones de euros), Italia (10.000 millones) o Portugal.

Mientras tanto, el Gobierno de Pedro Sánchez plantea cada semana nuevas fórmulas para incrementar la recaudación que penalizan la actividad económica (como la subida de las cotizaciones de los autónomos o el establecimiento de peajes en las autovías), mientras fía la recuperación a la llegada de los 70.000 millones de los fondos europeos.

El PP propone, por el contrario, abaratar las cotizaciones sociales para los jóvenes, parados de larga duración y autónomos, con el fin de reactivar la creación de empleo, y mantiene sobre la mesa su propuesta para abaratar en más de 7.000 millones de euros la factura de la luz.

La reforma fiscal planteada por el PP persigue que cada contribuyente pague una media de 700 euros menos al año en impuestos. Esta propuesta es uno de los 50 proyectos de Ley que el PP está redactando, a partir de las propuestas surgidas de su Convención Nacional que celebró el pasado mes de septiembre.

IRPF

El PP propone rebajar el tipo impositivo en todos los tramos de renta, para que cada contribuyente pague de media 200 euros menos al año. La rebaja del IRPF supondría un ahorro global de 4.000 millones de euros.

Los presidentes autonómicos del PP han anticipado esta medida rebajando el tipo impositivo en el tramo autonómico (con una bajada de medio punto en 2022, en el caso de Madrid) y aplicando nuevas deducciones (por compra y alquiler de vivienda, y por nacimiento y adopción de hijos, en el caso de Andalucía). En Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco también ha incluido medidas similares en su programa para las elecciones del 13-F.

Impuesto de Sociedades

Tan sólo en el primer año de la pandemia, más de 200.000 empresas echaron el cierre en España. Cuando la prioridad es reactivar la actividad económica, no es el momento de poner nuevas trabas a las empresas, como hace el actual Gobierno, señalan los populares. El plan fiscal del PP propone rebajar el tipo impositivo del Impuesto de Sociedades por debajo del 20% (hoy está en el 25%).

También plantea una bonificación del 50% sobre este tributo, para las empresas que se establezcan en municipios de menos de 5.000 habitantes. El objetivo de esta última medida es favorecer la actividad económica y la creación de empleo en la España despoblada.  

Impuesto de Patrimonio

La supresión de este tributo supondrá un ahorro de 1.400 millones de euros para los contribuyentes. También en este caso, las comunidades autónomas gobernadas por el PP han adelantado algunos pasos. Alberto Núñez Feijóo ha recortado en un 25% su cuota y Andalucía ha elevado su mínimo exento para determinados colectivos como las personas con discapacidad.

Sucesiones y donaciones

Dentro del margen que les permite la Ley, Madrid, Murcia y Castilla y León han aplicado una bonificación del 99% en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, para los familiares de primer grado (entre cónyuges, y de padres a hijos). El Gobierno de Pedro Sánchez quiere revertir esta medida e imponer el mismo tipo en toda España, alegando que constituye un agravio entre comunidades autónomas. 

Por el contrario, el PP apuesta por eliminar por completo el Impuesto de Sucesiones y Donaciones en toda España, lo que reportará a los contribuyentes un ahorro de 2.700 millones de euros.

Transmisiones y Actos Jurídicos

El PP también plantea eliminar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, para determinados supuestos para la compra de la vivienda habitual, lo que supondrá un ahorro de 600 millones para los contribuyentes. Hasta que sea realidad la supresión de este tributo, Feijóo ha rebajado este año el tipo impositivo general del Impuesto de Transmisiones, del 10% al 9%.

Cotizaciones sociales

De forma paralela a la rebaja fiscal, el PP plantea una rebaja de las cotizaciones sociales de los jóvenes y los trabajadores que sufren paro de larga duración, por importe de 2.000 millones de euros. 

Recibo de la luz

El Ministerio de Transición Ecológica ha hecho auténticos equilibrios contables para sostener que el presidente Pedro Sánchez ha cumplido su promesa sobre el recibo de la luz: los consumidores han pagado de media en 2021 una cifra "similar" a la de 2018, sostiene el Gobierno. Aunque esta no es, ni de lejos, la percepción de la gran mayoría de los usuarios. 

Ante lo que considera una promesa "incumplida" del Gobierno, el PP mantiene su propuesta para abaratar el recibo de la luz en un 20%, lo que reportaría un ahorro de entre 7.000 y 9.000 millones de euros. La fórmula de los populares incluye quitar el impuesto de generación eléctrica (que grava la factura en un 7%), mantener la reducción del IVA del 21% al 10%, retirar los costes no energéticos (que se cargarían a los Presupuestos Generales del Estado, en vez de al recibo de la luz) y utilizar el impuesto de derechos de CO2 que pagan las compañías eléctricas para reducir el precio final.