El líder de la oposición, Alberto Núñez-Feijóo, ha mantenido este miércoles en el hotel Palace de Madrid una reunión privada con medio centenar de inversores y los principales directivos de multinacionales de Estados Unidos y otros países. El principal objetivo era explicar su plan económico, reforzar el perfil institucional y tejer futuras alianzas.
Posteriormente, en público, el presidente popular ha protagonizado un almuerzo en el que ha desgranado sus propuestas económicas para España y en el que también ha mantenido un coloquio con los asistentes. El anfitrión de esta cita ha sido el presidente de la Cámara de Comercio de EE.UU. en España, Jaime Malet.
A esta convocatoria han acudido, entre otros, Helena Herrero, presidenta de HP en España y Portugal; Miguel Álava, director general de Amazon; Simon Amselen, máximo responsable de Walt Disney; Irene Cano, directora general de Facebook; Joaquín Arenas, presidente de Bank of America; Claudio Boada, de Blackstone, o Andrés Esteban, de Morgan Stanley.
En un salón abarrotado, el buen ambiente ha caracterizado el almuerzo con el jefe de la oposición. Mientras que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, marca cada vez más distancia con la clase empresarial, los empresarios no han dudado en apoyar a Feijóo, vaticinando además que será el "próximo presidente del Gobierno de España".
Durante su exposición desde el atril, el popular se ha explayado en la economía, enumerando sus principales propuestas en este ámbito. "La economía es el pilar fundamental sobre el que se construye en un país, mis prioridades son romper con tres dinámicas negativas que tenemos: la inflación, el bajo crecimiento y la desorbitada deuda pública", ha subrayado el dirigente popular.
Propuestas económicas
Para ello, ha apostado por "un pacto energético que combine medidas para reducir la factura de la luz y una reforma del sistema de mix energético que dé estabilidad y competitividad".
Recordando sus principales reivindicaciones al Gobierno, ha vuelto a repetir algunas medidas como la "deflactación de la tarifa del IRPF para las rentas inferiores a 40.000 euros" o la "bajada del IVA de los productos de primera necesidad", como, por ejemplo, los de higiene femenina.
También ha cuestionado el reciente anuncio del Ministerio de Hacienda para subir los salarios de los funcionarios del Estado en un 3,5%. Feijóo ha pedido "más transparencia sobre la situación de las cuentas públicas" y se ha preguntado por qué la cifra elegida no ha sido mayor. En esa línea ha pedido que se negocie "un pacto de rentas".
Ya en el terreno político, ha hecho continuos llamamientos a la institucionalidad, destacando en primer lugar las buenas relaciones que debe conservar España con países como Estados Unidos: "Es impensable que no sea un aliado estratégico, pero tiene que ser mucho más, un aliado insustituible", ha defendido.
[Feijóo pide bajar del 10% al 4% el IVA de los productos básicos: carne, pescado, conservas...]
Ensalzando las similitudes de ambas democracias, el presidente conservador ha manifestado la importancia de "evitar que las autocracias ganen terreno, sin conceder un palmo a aquellos que quieren acabar con las libertades". Igualmente ha cargado contra "la tentación populista, una sombra alargada que prevalece y que jamás es la respuesta que necesitan los ciudadanos".
Sobre su proyecto para España, ha pedido la vuelta de "una política creíble", reforzando las instituciones, para que "vuelva a ser un socio fiable en el mundo". En ese sentido ha lamentado que "no ayuda" la división del Gobierno en cuestiones como la permanencia en la OTAN o el apoyo de algunos ministros a "regímenes totalitarios".
Ante una crisis "económica, social e institucional", Feijóo ha abogado por "grandes liderazgos para afrontar los retos que hay en el horizonte". Su propuesta, ha remarcado entre los aplausos finales de los allí presentes, pasa por constituir "un gobierno libre de ataduras radicales, populistas y totalitarias".
Fuentes del Partido Popular destacan que con este encuentro se ha cristalizado que frente a la "disidencia del Gobierno, los actores económicos que antes miraban con interés a Sánchez ahora dirigen su mirada hacia Feijóo".
Génova cree que "si no lo vieran tan cerca de la Moncloa, no tendrían ese interés en él instituciones como la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España o los directivos de las principales multinacionales americanas y de otros países".