La campaña para las elecciones municipales y autonómicas del año que viene comenzará, al menos de manera formal, el próximo 12 de mayo. Sin embargo, el PSOE ha querido apretar el calendario y este sábado ha celebrado un mitin en la localidad madrileña de Getafe que ha tenido claros tintes de pistoletazo de salida de la carrera electoral.
El acto ha contado con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se ha visto arropado por figuras del PSOE autonómico y municipal en Madrid. Al mismo, han acudido el candidato socialista para suceder a Isabel Díaz Ayuso, Juan Lobato, y la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández. Como símbolo nada velado, detrás de la tribuna de oradores se han sentado varios alcaldes socialistas.
Pero Sánchez ha querido aprovechar la ocasión también para ofrecer una enmienda a la totalidad de las posturas del Partido Popular y sacar pecho por sus medidas. Donde más hincapié ha hecho ha sido en defender las reformas fiscales que el Gobierno presentó antes de los Presupuestos Generales del Estado como respuesta a las distintas rebajas que han hecho varias autonomías por España.
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"Recibimos más de lo que pagamos con nuestros impuestos y el debate tiene que ser cuánto aportamos cada cual", ha asegurado, y ha entrado directamente a criticar el mantra del Partido Popular de que, donde mejor está el dinero, es en el bolsillo de la gente. "El coste medio de un trasplante de corazón en España es de 90.400 euros. En Estados Unidos, con un sistema sanitario privado, es de un millón", ha remarcado.
"Gracias al estado de bienestar, la gente se hipoteca para un coche o una vivienda, pero no para tratarse el cáncer ni llevar a sus hijos a la universidad", ha dicho, y ha pedido a las empresas energéticas y a los bancos, que están viendo beneficios en esta situación de crisis, que "arrimen el hombro para poder bajar los impuestos a la clase media trabajadora".
Para centrar el debate tributario en datos concretos, Sánchez ha sacado ejemplos de cómo la reforma fiscal impulsada por el Ejecutivo afecta a la realidad de la gente. Ha dicho que un trabajador que haga una declaración de la renta conjunta y que cobre menos de 19.000 euros va a ahorrarse 330 euros, o que un jubilado que cobre una pensión de 16.500 se ahorrará 689 euros.
Ese aspecto, el de las pensiones, ha sido otro de los frentes en los que el presidente ha querido arremeter contra el PP. Ha acusado a la formación presidida por Alberto Núñez Feijóo de "volar todos los acuerdos" y de no respetar el Pacto de Toledo porque los conservadores no consideran sostenible vincular las pensiones al IPC.
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La cuestión de las pensiones es algo que lleva en el debate público desde que se presentaron los Presupuestos Generales del Estado y el Partido Popular aún no ha desvelado realmente cuál es su postura al respecto, postergando el debate, seguramente, hasta la campaña de las municipales y autonómicas.
Aún así, Sánchez ha aprovechado que sus rivales se encuentran en tierra de nadie para recordarles que en noviembre de 2020 se renovó el Pacto de Toledo y que el acuerdo suscrito instaba a revalorizar las pensiones conforme al IPC. Todo ello contó, recuerda el presidente, con el voto a favor del PP.
Autonómico y municipal
Aunque Sánchez ha sido el protagonista principal y ha hablado de materias de su Gobierno, lo cierto es que el acto ha tenido un irrenunciable aura de municipios y autonomías. A falta aún de un candidato del PSOE para disputar la Alcaldía de Madrid a José Luis Martínez Almeida, el toque local lo han puesto la alcaldesa de Getafe y otros regidores de localidades madrileñas. Todos ellos han arropado al candidato a la Comunidad de Madrid, Juan Lobato.
El discurso esgrimido tanto por Lobato como por Hernández ha tenido un claro objetivo: criticar a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. La alcaldesa de Getafe ha tildado al Ejecutivo madrileño de "indigno" por las palabras del vicepresidente y portavoz de la Comunidad, Enrique Ossorio, que dijo que investigar las muertes de ancianos en residencias durante la pandemia era algo que respondía a intereses electorales y que las familias "ya lo han superado".
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Lobato también ha acusado a Ayuso de llevar a cabo un regalo fiscal de 992 millones de euros "para unos pocos de cientos de grandes patrimonios" y ha llegado a decir que esa gente beneficiada prefiere que les cobren más impuestos porque son más solidarios que la presidenta madrileña.
El candidato ha querido recordar que en las últimas elecciones generales el PSOE obtuvo más de 900.000 votos en Madrid y ha opinado que esa mayoría es la que va a conseguir que él llegue a la presidencia de la Comunidad. Pedro Sánchez ha mostrado, como no podía ser de otra forma, su apoyo a Lobato: "Nos vais a tener a todos, a mí como a uno más, para que le demos la vuelta a este gobierno regional que merece un cambio", ha dicho el presidente.