El PP de Feijóo inicia el doble año electoral con 5,3 puntos de ventaja sobre Sánchez

Este 1 de enero de 2023 es el pistoletazo de salida para los partidos políticos en España. Empieza una carrera de fondo que tiene su meta en las elecciones generales de otoño, aunque entremedias habrá una parada el 28 de mayo con las municipales y autonómicas, cita que resultará trascendental en el tablero nacional. 

El principal partido de la oposición, que deja atrás su año más convulso por la abrupta marcha de Pablo Casado, parte con buenas perspectivas. Tras una tendencia de retroceso que empezó a producirse en septiembre, Feijóo recobra aliento en enero con una subida de 0,8 puntos con respecto a la anterior encuesta. Además, desde la victoria de Moreno el PP ha conseguido mantenerse por encima del umbral del 30%.

Esto, unido a una ligera caída de Sánchez, que frena la remontada que había iniciado en el mes de octubre, agranda la distancia entre PP y PSOE a más de 5 puntos. Hace un mes esa brecha había llegado a recortarse hasta a 3,8 puntos. 

[Sánchez sigue recortando distancias y se acerca a 3,8 puntos de Feijóo, pero el PP aún podría gobernar]

El presidente del Gobierno pierde su mejor estimación desde mayo. Si el sondeo de diciembre dibujaba la posibilidad de que obtuviera 101 escaños, la proyección actual es que se quede con 98. El PSOE, no obstante, sigue lejos de su peor registro en junio, cuando la proyección fueron 85 diputados y un 23% de los votos.

En las últimas semanas, Sánchez ha encadenado tres polémicas de calado que, pese a los intentos de que pasaran inadvertidas con votaciones en el Congreso de madrugada o en el Senado el día de la Lotería Nacional, han terminado pasando factura al PSOE.

Son la derogación de la sedición y la rebaja de la malversación, para cumplir con ERC; la reforma exprés de las leyes del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional, fagocitada por el propio órgano de garantías por un recurso del PP, y la rebaja incesante de rebajas de condenas a agresores sexuales por el efecto perverso de la ley del sólo sí es sí.

Estos asuntos han marcado la agenda política en la recta final del año. Especialmente llamativo ha sido el embrollo en el Alto Tribunal, ya que el PSOE comparó la actuación judicial del PP con el golpe de Tejero el 23 y Sánchez sembró dudas sobre la legitimidad del propio Tribunal. Esto desató una crisis institucional a la que incluso se refirió Felipe VI en su discurso navideño.

Con estos antecedentes, Sánchez no consigue rentabilizar el tercer paquete de medidas anticrisis, que anunció el pasado martes tras la celebración del último Consejo de Ministros del año, en el que también hizo balance. La supresión del IVA de los alimentos y el cheque de 200 euros a familias vulnerables no han tenido efecto en la demoscopia, de momento.

Los pactos

Este contexto, además, beneficia al bloque de la derecha, que registra una subida destacada como consecuencia también de la recuperación de Vox, que vuelve a estar por encima del 15%. La polarización política ha terminado por beneficiar a Santiago Abascal, que presionó al PP para registrar una moción de censura contra Sánchez por la sedición y que mantiene su órdago de presentarla en solitario en enero. 

La suma de PP y Vox alcanzaría en el Hemiciclo hasta 184 diputados, muy por encima de la mayoría absoluta, fijada en 176. En caso de reunir los apoyos de Navarra Suma, la derecha alcanza un total de 186 diputados. De esta forma, Feijóo no tendría problema en llegar al Gobierno. 

Por el contrario, las opciones que tiene el actual bloque de investidura para mantener su influencia en la Cámara serían escasas, ya que se dejan un buen puñado de diputados. La suma de PSOE, Podemos y sus socios habituales de ERC, PNV, Bildu, Más País + Compromís, PRC, BNG y España Vaciada no sobrepasaría los 152 diputados.

Transferencia de voto

En cuanto a la transferencia de voto, el PSOE consigue retener a un 70,5% de los partidarios que consiguió en las últimas elecciones de 2019, algo más que en la anterior encuesta de diciembre. El PP pescaría en la formación de Sánchez hasta un 7,5% de electores, mientras que Podemos se quedaría con el 3,2% de los votantes socialistas y Más País con el 1,8%. 

El PP, por su parte, pierde algo de fidelización entre sus votantes con un 85,4%. Un 4,8% iría a recalar en Vox, menos que anteriores ocasiones. Y a la abstención pasarían un 4,1% de los votantes de Feijóo. La mitad que en el PSOE, que tendría a un 6,2% de sus apoyos en esta situación. 

Vox mantiene una tendencia en la que deja de retener votantes. El porcentaje de fidelidad se sitúa en el 82,8%, que sigue siendo elevado. Pero en favor del Partido Popular perdería hasta un 14,3% de los apoyos, más que en anteriores ocasiones. 

En Podemos la trasferencia de voto sigue siendo llamativa, ya que el PSOE incrementa el nicho de votantes que recibe de la formación morada: hasta un 12,7%. Más País se quedaría con un 6,5% de los electores. 

Por último, Feijóo conseguiría pescar en el espacio electoral de Ciudadanos hasta un 33,2% de los votos. La formación que lidera Inés Arrimadas solo conseguiría preservar un 21,2% de los viejos apoyos. 

Ficha técnica

1.200 entrevistas en toda España, extraídas mediante cuotas prefijadas y cruzadas de sexo, edad y provincia, de forma mixta CATI y CAWI, mediante plataforma Gandia Integra, entre los días 28 al 31 de diciembre de 2022.

La muestra se ha ponderado por situación laboral, nivel de estudios, y recuerdo de voto en las elecciones del 10-N. La convergencia x iteracción del equilibraje del 97% (error para intención directa=3%). SocioMétrica es socio de Insights + Analytics España, rama empresas, asociación de Data Science que integra a Aneimo y Aedemo.