Sánchez deberá responder a Feijóo sobre Bildu en el cara a cara del Senado que planteó con otro guión

Pedro Sánchez sólo se ha pronunciado una vez sobre este asunto. Lo hizo desde Washington, a preguntas de los periodistas tras su reunión con el presidente americano Joe Biden. Entonces dijo que "no es decente" presentar a terroristas como candidatos, pero eludió romper con sus socios. En España todavía no dicho nada al respecto.

Este martes, tendrá que hacerlo en el cara a cara que mantendrá con Alberto Núñez Feijóo en el Senado. Un pleno que programó en la Cámara Alta con un guión muy distinto al que, finalmente, tendrá que seguir. 

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Aunque los líderes de PSOE y PP no concurren a estos comicios del 28-M, Sánchez los ha convertido con sus anuncios y compromisos en una primera vuelta de las generales del mes de diciembre. Y a falta de un formato televisivo en el que poder confrontar con Feijóo, buscó este debate en el Senado, convencido de sacarle partido.

Sin embargo, no contaba con el revuelo que se iba a generar por las listas de uno de los socios prioritarios del Gobierno. Esta circunstancia ha terminado poniendo contra las cuerdas a los socialistas.

La negación de Calviño

Desde que trascendió la noticia, algunos barones y también ministros del Gobierno han tratado de desmarcarse de la formación independentista. Ha sido inútil. La última que lo intentó fue ayer la vicepresidenta Nadia Calviño, que trató de negar la evidencia al asegurar que el Gobierno no tiene "ningún pacto" con Bildu.

El Partido Popular, consciente de que este asunto puede hacer mella en el electorado del PSOE, ha martilleado hasta pedir al Gobierno que active a la Abogacía del Estado para estudiar la fórmula legal que excluya a los "condenados por asesinato" de las listas. Además, ha exigido a Sánchez una ruptura "solemne" de todas las relaciones con este partido. 

Este martes, Feijóo preguntará al presidente si "considera que los españoles merecen que se les diga la verdad". Según desvelan en su entorno, aprovechará el envite para criticar los pactos con Bildu con "no menos que lo que ha dicho algún barón del PSOE en público". 

Fuentes de la dirección popular subrayan a EL ESPAÑOL que Sánchez ya dio una "muestra de debilidad" al convocar este debate en el Senado. Explican que si su partido estuviera fuerte, no tendría que "inventarse escenificaciones ni movimientos arriesgados".

Además, deslizan que en Moncloa hay ahora arrepentimiento por haber programado este cara a cara. Se remiten a la espantada de la portavoz socialista, Pilar Alegría, que anuló este lunes la rueda de prensa que tenía prevista en Ferraz. "Sánchez también cancelaría ahora el debate en el Senado", apostillan en Génova. 

A la afirmación de la vicepresidenta Calviño de que no hay alianza con Bildu, el PP responde que "tienen un pacto hasta para anunciar exclusivas", y citan el caso de la Ley de Vivienda. "Dejaron que la anunciara el portavoz parlamentario del Gobierno: Bildu y ERC", ironizan las citadas fuentes. 

Este martes, Feijóo proseguirá con su ofensiva y volverá a pedir a Sánchez que actúe ante la "ignominia" de las listas con exetarras. "Si no da indicaciones a la Abogacía del Estado o la Fiscalía, que según él depende del Gobierno, para que analice este asunto, entonces lo que está diciendo es que lo que hace Bildu le parece bien a efectos jurídicos, y que este asunto se soluciona con una declaración", censuran en el entorno del líder popular. 

Sánchez, ante el aluvión de críticas del PP, reprochó este martes en Vitoria que "cada vez que la derecha no tiene nada que ofrecer o ve que pierde, recurre a ETA". Aunque eso no hará que Feijóo abandone esta baza electoral que Bildu le ha puesto en bandeja.  

En las filas populares se congratulan de que en la primera semana de campaña para el 28-M de lo que se hable es "del Gobierno y de sus pactos parlamentarios". Al respecto, añaden: "Sánchez pensaba que sus alianzas estaban descontadas y que no pasarían factura y se encuentra ahora con una rebelión mediática de sus barones".

En el PP celebran que los anuncios del presidente para tapar este asunto, como la bonificación del cine para mayores de 65 años, no estén calando en el electorado. En cambio, en Génova sí detectan que la estrategia de atar a los "candidatos de Sánchez" a Bildu está dando resultado a la hora de afianzar el trasvase de votantes procedentes del PSOE. 

En sus mítines, Feijóo ya ha apelado de forma reiterada a ese nicho de electores. "Necesitamos a los que votaban al PSOE porque entendían que era un partido de Estado y ahora ven cómo sus socios van contra el Estado. Quién ha visto y quién ve al PSOE español, que jamás se sometía a planteamientos independentistas", llegó a decir en Extremadura.