Podemos y Sumar llegan a un preacuerdo político que encalla por el veto a Irene Montero y Echenique

Aunque la vicepresidenta segunda no ha llegado a pronunciar directamente que no les quiere en las listas de Sumar, cada vez son más las voces en la formación morada que aseguran que hay un veto. Tanto, que ya han desplegado una ofensiva para intentar evitarlo.

Los morados aseguran que, con su defensa de que haya nuevas caras en Sumar –sin que este requisito afecte al perfil de la vicepresidenta– y el aplauso a Alberto Garzón y Ada Colau por no concurrir a las elecciones generales de 2023, Díaz está mandando mensajes velados a la ministra de Igualdad y al portavoz de Podemos en el Congreso.

[Pablo Iglesias denuncia presiones para que Irene Montero esté "fuera" de Sumar: "Buscan humillar"]

Además, a pesar de las especulaciones, Yolanda Díaz no las desmiente, sino que las alimenta. No ha dicho que quiera contar con ellos y cuando se le ha preguntado responde que es algo que tiene que decidir cada uno.

Desde el entorno de la vicepresidenta segunda aseguran a este diario que no se está hablando de vetos, pero no responden a la pregunta de si les incluiría en las listas.

El exvicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, criticó este lunes que hay "dinámicas" que buscan la "venganza" y la "humillación" de Podemos en las negociaciones y ha denunciado que hay "presión" para que Montero esté "fuera".

Iglesias también acusó a Más Madrid, los Comunes y Compromís de no querer un acuerdo con Podemos y criticó que estas tres formaciones "de ámbito territorial" prefieran negociar en solitario la confección de las listas de Sumar. "Están diciendo abiertamente que con Podemos, no", expresó el exvicepresidente.

[Pablo Iglesias acusa a Compromís, Más Madrid y los Comunes de vetar a Podemos en las listas]

En la rueda de prensa de los lunes, la portavoz del partido, Isa Serra, dijo que "los vetos personales no ayudan y son intentos de torpedear los acuerdos y la unidad". En la formación morada son bastante tajantes al respecto: sin Irene Montero –y también Echenique– no habrá acuerdo.

Tres días

Apenas quedan tres días para que el plazo venza y ese parece ser el principal escollo. El próximo viernes hay que registrar la coalición con la que concurrirán a las generales del próximo 23 de julio. Si bien las listas se podrían abordar después del viernes, nadie quiere firmar nada sin tener todo atado.

De momento, el preacuerdo ha abordado la posición de la coalición en asuntos como la OTAN, la Monarquía o la plurinacionalidad. Estos son asuntos en los que hay bastante sintonía entre las formaciones.

El principal problema es el reparto de poder. Sumar estará integrado por muchas formaciones con implantación territorial, como Compromís o Más Madrid, que reclaman puestos de salida.

[Podemos dice que quien veta a Irene Montero en Sumar "pone la alfombra roja a la extrema derecha"]

Podemos, sin embargo, obtuvo unos malos resultados el pasado 28-M y, aun así, quiere hablar de tú a tú a Sumar porque entienden que el motor de la militancia es suyo y que, si bien se vota a los partidos regionales en las elecciones autonómicas, en las generales la formación morada recoge mucho de ese voto.

Desde Podemos ven en Díaz una estrategia de arrinconarles y ofrecerles un espacio minúsculo y que el único liderazgo que quede en Sumar después del 23-J sea el de la propia Yolanda Díaz.

Mientras tanto, el reloj sigue corriendo y la intención de Díaz de tener esta situación resuelta antes de mañana miércoles parece alejarse. La duda es si apurarán los plazos al máximo, corriendo el riesgo de que pase algo similar a lo sucedido en Andalucía, donde la marca de Podemos se quedó fuera de las últimas autonómicas por no registrarse a tiempo.