Satisfacción en Moncloa por el pacto de Valencia: no quitará votos al PP pero movilizará a la izquierda

Fuentes socialistas explican que no esperaban que el partido de Alberto Núñez Feijóo abriera tan pronto esa puerta y daban por hecho que retrasarían los pactos en las comunidades autónomas como Extremadura, Aragón, Baleares y Comunidad Valenciana hasta después de las generales.

Este martes les cogió por sorpresa el acuerdo en Valencia, justo cuando intentaban que la agenda electoral se centrara en economía y los buenos datos, con la vicepresidenta Nadia Calviño como abanderada.

Entienden que el pacto de Gobierno entre el PP y Vox para gobernar en la Comunidad Valenciana puede ayudar a movilizar a los electores de la izquierda. Por eso, los socialistas han acogido la noticia con satisfacción. Ahora, con Pedro Sánchez a la cabeza, agitarán en los próximos días el peligro de un acuerdo entre la derecha y la extrema derecha para gobernar en todas las instituciones.

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La tesis de Moncloa es que es posible que haya un acuerdo global entre el partido de Feijóo y el de Abascal para ayuntamientos, comunidades y, en el futuro, el Gobierno central, si fuera necesario. Ese será uno de los mensajes de los socialistas y del Ejecutivo para las próximas semanas.

Entienden que Feijóo "se ha quitado el precinto" sin llegar siquiera al inicio de la campaña oficial, tras lanzar "botes de humo" durante meses sobre su resistencia a pactar con la extrema derecha. Es difícil que ahora pueda insistir en el argumento de que Sánchez negó sus pactos para luego cerrarlos.

El PSOE considera que el temor a esa coalición con la extrema derecha en el Gobierno no resta voto al PP, porque está muy consolidado en ese electorado el rechazo al Ejecutivo de Pedro Sánchez. Ponen como ejemplo los datos de las municipales en Castilla y León, única comunidad donde ya hay un Gobierno de coalición de PP y Vox.

De hecho, el PP subió en municipales en Castilla y León casi cinco puntos con respecto a 2019, hasta llegar a un 39,9% de los votos, casi nueve puntos más que el PSOE. En las autonómicas de 2022, el PP tuvo el 31,43% de los votos, es decir, ahora ha subido más de ocho puntos, pese a dicho pacto.

Los socialistas han constatado también que el mensaje del miedo a la extrema derecha no les funcionó en Andalucía, Castilla y León y Madrid, antes de las elecciones del pasado 28 de mayo. Incluso, han constatado que favorece el voto útil al PP, puesto que los electores se agrupan más que nunca en dos bloques.

Sí hay un porcentaje de votos que pierde el PSOE a su derecha y, por eso, Moncloa entiende que el acuerdo PP-Vox le puede servir para frenar ese flujo de posibles votantes.