A 20 días de que se destapen las urnas en España, Alberto Núñez Feijóo sigue afinando el tiro. "Mi objetivo es una mayoría suficiente para gobernar, a partir de 160 escaños para tener un gobierno sólido". Esa es la meta que se ha fijado este lunes para no verse obligado a introducir a Vox en el Consejo de Ministros.
Porque el aspirante popular, en la entrevista que ha ofrecido esta mañana al Programa de Ana Rosa, no ha negado que existe una posibilidad de que tenga que presidir una coalición con los de Santiago Abascal tras el 23-J. Así lo ha deslizado cuando ha reprochado a Pedro Sánchez su pasividad ante miembros de su gabinete como Irene Montero.
"No tenga duda de que si me encuentro con un ministro de Vox como los que se ha encontrado Sánchez, será cesado. Hay ministros suyos que le han aguantado semanas, meses; lo único que no ha podido hacer Sánchez es nombrar y cesar a los ministros de Podemos", ha remarcado.
Se trata de una hipótesis. Como casi todos los escenarios que se plantean a tres semanas de que se celebren los comicios. Pero la intención manifestada por Feijóo, desde luego, es la de conformar un Ejecutivo monocolor. De hecho, buena parte de su aparición televisiva la ha centrado a desgranar ese objetivo.
A su juicio, el único horizonte certero a día de hoy es que "el PP va a ganar las elecciones". La duda, ha añadido, "es la diferencia". Según su teoría, cuantos más apoyos tenga la candidatura que encabeza, más posibilidades habrá no sólo de que se produzca el vuelco político en España, sino de que Vox no entre en el Gobierno.
En ese sentido, ha querido transmitir "un mensaje muy claro" a los electores: "Si usted no quiere que Sánchez siga cuatro años más en el Gobierno, vote al PP. Si le gusta que Bildu y ERC sigan mandando en la política del Estado y el populismo comunista de Sumar siga en la coalición de la izquierda, siga votando al PSOE".
Sobre los acuerdos que su formación política ha alcanzado con Vox en la Comunidad Valenciana y Extremadura para gobernar en coalición, Feijóo ha cargado las tintas contra el PSOE, que está "buscando el miedo" y, a su vez, es "el que facilita las coaliciones con Vox". Porque "no deja gobernar al PP aún ganando".
"Vox aliado del sanchismo"
El líder de los populares ha subrayado que si realmente los socialistas tuviesen "interés en que Vox no esté en el Gobierno, sería muy sencillo: haciendo lo que ha hecho el PP en los ayuntamientos de Barcelona, Vitoria y la diputación foral de Guipuzkoa", que se ha abstenido para dejar al margen a los independentistas. Al respecto, ha criticado que el verdadero afán de Sánchez es "que el PP no esté en el Gobierno".
Y los pactos con Vox, ha pasado a comentar la falta de entendimiento. Para los populares la bajada en las encuestas de Abascal se explica con la actitud que de su partido en algunas comunidades donde está "dispuesto a votar con la izquierda para que no gobierne el PP". "Está a favor de que se quede el sanchismo, está claro que Vox es un buen aliado del sanchismo", ha recriminado Feijóo.
Es el ejemplo de Murcia, donde el presidente Fernando López Miras podría no ser reelegido en la próxima sesión de investidura por la negativa de Vox a brindar dos abstenciones. A pesar de que el barón popular quedó a dos escaños de la mayoría absoluta. Por ello, el presidente del PP considera que "los votantes de Vox están tomando nota".
Con el partido verde ha vuelto a tomar distancias al dejar claro que una línea roja sería "la violencia machista" y que él está a favor de los "derechos de colectivos" LGTBI, que son más importantes que "las banderas". De esta forma, ha eludido censurar que se quite la tela arcoíris de la fachada de ayuntamientos donde Vox gobierna.
En cuanto a los dos interrogantes más repetidos durante la precampaña: los futuribles en un hipotético Gobierno popular, Feijóo ha dado más detalles: el ministro de Economía no es político, "ni ha tenido ningún cargo". Lo contrario a su vicepresidenta: "Es una política conocida, que nunca ha estado en el Gobierno de la nación, pero que ha gobernado".