El nuevo Gobierno de Aragón ha arrancado este sábado tras la toma de posesión de los diez nuevos consejeros, en un acto solemne que se ha celebrado en la Sala de la Corona del Edificio Pignatelli, sede del Ejecutivo regional.
El acto ha estado presidido por el jefe del Gobierno autonómico, el 'popular' Jorge Azcón, quien les ha entregado a cada uno de ellos una insignia con el escudo de Aragón, símbolo de ser consejero, así como el documento de su nombramiento.
El vicepresidente primero y consejero de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia es Alejandro Nolasco y la vicepresidenta segunda y consejera de Economía, Empleo e Industria, así como portavoz del Ejecutivo, Mar Vaquero.
Todos los consejeros han jurado o prometido su cargo, tras lo que Azcón ha pronunciado un discurso y les ha dicho que asumen "la responsabilidad inmensa de gobernar", y a quienes les ha aconsejado aplicar las virtudes necesarias, según Baltasar Gracián, para regirse con acierto en el ejercicio de la política y en el desarrollo global de la vida: exigencia, inteligencia, discreción y prudencia.
El presidente autonómico ha añadido también que los proyectos salen adelante "con trabajo, trabajo y trabajo" y que su objetivo ha de ser mejorar la vida de los aragoneses, quienes "serán los que, en libertad y con completa legitimación y razón, juzguen nuestra labor al frente del Gobierno".
"Queridos consejeros, solo existe un camino hacia el éxito: el trabajo" y "quienes lleváis tiempo a mi lado sabéis que lo digo y lo repito sin descanso, pero creo en ello y me lo he aplicado, con buenos resultados".
Azcón ha subrayado que si al trabajo se le añade la exigencia, la inteligencia, la discreción y la prudencia, "os aseguro que estaremos a la altura de lo que nos demandan los aragoneses y podremos ofrecerles los proyectos, las medidas y las oportunidades que necesitan para mejorar sus vidas".