La Ley de Amnistía que mandará al olvido los delitos que cometieron los responsables del procés ya está en el Congreso de los Diputados. Esta mañana, la Mesa, órgano rector de la Cámara, calificó el texto con el voto favorable de PSOE y Sumar, y con el rechazo del Partido Popular. El siguiente paso, la toma en consideración de la norma, llegará más adelante.
En las próximas horas, la ley se publicará en el Boletín de las Cortes y se enviará al Gobierno para que éste dé conformidad a su debate parlamentario. Aunque el margen de tiempo que tiene Moncloa es de treinta días, podría emitir su veredicto en cuestión de horas. Por lo que la Junta de Portavoces, que se reunirá este jueves, ya podría poner fecha a la primera sesión plenaria que estudiará la norma.
Concretamente, la tramitación parlamentaria de la medida de gracia empezará el 12 de diciembre, cuando se celebrará el primer Pleno ordinario de la legislatura. Este martes, la presidenta Francina Armengol avanzó a los miembros de la Mesa un calendario para lo que resta de año: con la apertura solemne de la legislatura el próximo 29 de noviembre y con una sesión para reformar el Reglamento y constituir las nuevas comisiones legislativas justo después.
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A partir de ahí, la Cámara empezará a funcionar a pleno rendimiento en diciembre, pasado el puente de la Constitución. Y la primera iniciativa que debatirán los diputados será la toma en consideración de la amnistía, piedra angular que sostiene al nuevo Gobierno de coalición. Después, la norma pasará a la comisión correspondiente, donde se incorporarán, o no, las enmiendas que presenten los distintos grupos.
Con esta previsión, el Congreso podría dar luz verde a la amnistía, que se tramitará por la vía de urgencia, antes incluso de que termine el año. Aunque su entrada en vigor tendrá que esperar, porque el Senado, que recibirá la ley en febrero, tardará dos meses en estudiarla gracias a la reforma del Reglamento promovida por el Partido Popular. Finalmente, una vez que el Senado con la mayoría absoluta del PP apruebe el veto a la ley, ésta volverá al Congreso donde ya sí quedará vista para su aplicación.
Este martes, PP y Vox han anunciado que recurrirán la decisión de la Mesa del Congreso de dar luz verde a la tramitación de la amnistía. Lo harán primero con un escrito de reconsideración, ya que ambos grupos insisten en remarcar la "inconstitucionalidad" de la norma.
En ese sentido, cunde un profundo malestar en el grupo popular por el informe que emitió ayer Fernando Galindo, flamante secretario general del Congreso y hasta hace poco alto cargo en Gobierno de Sánchez. Su conclusión fue que no ve en la ley "palmaria inconstitucionalidad" como para pronunciarse en contra de su calificación por parte de la Mesa. Antaño, su antecesor en este cargo, forzó que la Cámara ni siquiera admitiese la amnistía que propusieron ERC y Junts por estar al margen de la legalidad.