La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha logrado frenar, al menos de momento, la rebelión interna en el seno del Gobierno por el nombramiento de Isabel García como nueva directora del Instituto de las Mujeres.
Fuentes oficiales del Ministerio han destacado el compromiso personal y político de Isabel García en la defensa de los derechos de las personas LGTBI y la lucha contra la violencia de género, frente a las críticas que ha recibido en las últimas horas por parte de los principales dirigentes de Sumar y Podemos.
La ministra Ana Redondo ha decidido reafirmar así el nombramiento de la nueva directora del Instituto de las Mujeres, cuyo cese habían pedido la ministra Mónica García, la senadora Carla Antonelli, Elizabeth Duval, Íñigo Errejón y Rita Mestre desde Sumar. A las críticas se han sumado desde Podemos las exministras Ione Belarra e Irene Montero.
Ambos partidos han acusado a Isabel García de difundir la "transfobia", por mostrar opiniones críticas sobre la ideología queer (que niega la existencia del sexo biológico y presenta el género como una decisión personal, que puede modificarse como un acto de voluntad cuantas veces sea necesario a lo largo de la vida).
Primero Podemos, durante la etapa de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad, y ahora Sumar, se han alineado con esta visión del movimiento trans, frente al feminismo clásico que defienden dirigentes del PSOE como la exvicepresidenta Carmen Calvo.
La propia Isabel García ha salido al paso de estas acusaciones con una cadena de mensajes, en los que pide disculpas por sus declaraciones del pasado y muestra su "total y absoluto compromiso" con la ley trans de Irene Montero.
Es una ley pionera, señala, que "protege y garantiza los derechos de las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales, con el objetivo de erradicar cualquier discriminación y contribuir a su desarrollo en libertad e igualdad".
"Desde mi nueva posición al frente del Instituto para las Mujeres", añade Isabel García, "trabajaré para hacer una política integradora en favor de todas las mujeres y, por supuesto, de los colectivos LGTBI+ y de las personas más vulnerables".
Isabel García también ha recibido el respaldo de la asociación Feministas Socialistas (FeMeS), próxima al PSOE. La vicepresidenta de FeMeS, Altamira Gonzalo, ha celebrado que vuelva a haber al frente del Instituto de las Mujeres una activista que "defiende los derechos de las mujeres".
Isabel García (Las Palmas de Gran Canaria, 1968) ha sido responsable de Igualdad de la Diputación de Valencia y del Ayuntamiento de Xirivella (Valencia). En el primero de estos cargos, impulsó la creación de la Red de Municipios contra la violencia de género de la provincia de Valencia, que fue galardonado en 2022 por la entonces ministra de Igualdad, Irene Montero.
Entre 2017 y 2021 dirigió la Delegación LGTBI de la Ejecutiva Federal del PSOE y se convirtió en la primera mujer lesbiana que asume esta responsabilidad. Durante los últimos tres años, ha sido asesora del Ministerio de Transportes.
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FeMes cree que las críticas de Podemos a la nueva directora del instituto de las Mujeres se deben, en parte, a que el partido morado no ha asumido que el PSOE haya recuperado el Ministerio de Igualdad y se haya negado a mantener en el cargo a Irene Montero.
En cambio, ve cierta "teatralidad" en las críticas de Sumar. Altamira Gonzalo recuerda que Yolanda Díaz y otros cuatro miembros de Sumar se sientan en el Consejo de Ministros y es allí, en todo caso, donde deberían haber planteado sus objeciones al nombramiento aprobado el miércoles. "Si existían desavenencias, es allí donde deberían haberlas expresado, por una cuestión de lealtad", señala.
La vicepresidenta de FeMes celebra que el PSOE haya recuperado el Ministerio de Igualdad: "Estamos esperanzadas de que se vuelva a poner sobre la mesa la agenda feminista para mejorar la vida de todas las mujeres".
Porque, a su juicio, durante los cuatro años de Irene Montero el Ministerio de Igualdad dio la espalda al movimiento feminista y "no se produjeron avances importantes en los derechos de las mujeres".
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Al respecto, Altamira Gonzalo recuerda que la ley del sólo sí es sí ha tenido "consecuencias negativas para las mujeres" (ha provocado rebajas de pena para más de 1.200 agresores sexuales, de los cuales 121 han salido de la cárcel, según las cifras oficiales del CGPJ), al igual que la ley trans, que a su juicio ha supuesto un retroceso en los derechos de las mujeres.
El colectivo FeMeS considera que, en la nueva etapa bajo la dirección de Ana Redondo, tiene una amplia tarea por delante para retomar la agenda feminista: tomar medidas "mucho más eficaces" en la lucha contra la violencia de género, recalca Altamira Gonzalo, abolir los vientres de alquiler, la prostitución y cualquier forma de trata de personas con fines de explotación sexual.
Frente a las críticas de Sumar y Podemos, el Ministerio de Igualdad ha destacado que la nueva directora del Instituto de las Mujeres, Isabel García, ha recibido numerosos reconocimientos por su labor, también en campos como la igualdad entre hombres y mujeres, el deporte y la juventud.
Entre ellos, el Premio Meninas 2018 concedido por la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana por la lucha contra la violencia machista; el Premio Dones Progressistes 2016 concedido por la Federació de Dones Progressistes de la Comunitat Valenciana y la Medalla e insignia de bronce al mérito deportivo 2019 en la categoría Personalidades de la Federación Española de Balonmano.
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Distintos dirigentes de Sumar y Podemos han cargado las tintas, en las últimas horas, contra la nueva directora del Instituto de las Mujeres.
La portavoz de feminismo de Sumar, Elizabeth Duval, ha calificado su nombramiento de "vergonzoso y lamentable" y ha acusado a Isabel García de "poner la diana del odio en las personas trans". Según la senadora de Sumar Carla Antonelli, Isabel García "insulta, veja y desprecia" a las personas trans por sus críticas de la ideología queer.
Por su parte, la portavoz de Podemos Isa Serra ha calificado de "tránsfoba y reaccionaria" a la directora del Instituto de las Mujeres. A su juicio, "el PSOE no ha entendido la última ola feminista y esa reacción le ha llevado a generar un monstruo, porque las posiciones tránsfobas han ido más allá de lo que la mayoría del Partido Socialista hace unos años hubiese aceptado".
"El Instituto de las Mujeres", recalca Isa Serra, "tiene que representar al conjunto de las mujeres: a las mujeres trans, a las mujeres precarias, a las mujeres racializadas... y eso es lo que ha dicho el movimiento trans desde la última ola, sobre todo desde 2018".